Estas dos facultades las debe utilizar con mucho cuidado, pues de su recto uso depende en gran parte la marcha de la sociedad. La inteligencia capacita al hombre para conocer la verdad de las cosas y el hombre debe utilizarla precisamente para la búsqueda de la verdad.

Me fijé que el autor usó el término recto, uso que quizá al lector le parezca una definición correcta y sin más importancia, pero en mi opinión tiene mucha trascendencia, pues implica tener la razón absoluta. La palabra recta o recto según el diccionario significa sin desviarse del trayecto, que es directo, que no se desvía, que no se inclina a un lado o a otro, o sin curvas. Justo, severo y firme. Honrado, íntegro. Pero para mí dar utilizar la palabra recto en la inteligencia, y libre significa otra cosa distinta que buscar la verdad de las cosas. Para mí una persona inteligente es aquella capaz de resolver los problemas sociales, económicos y medioambientales. Una persona que resuelve los problemas matemáticos no me va a salvar la vida, ni va a crear trabajo, ni va a solucionar el hambre en el mundo. No digo que no tenga mérito, pero de poco nos sirve a los demás mortales que sepa resolver ecuaciones.

Respecto a que el hombre es un ser libre, discrepo. La explicación es suficientemente extensa que se merece un capítulo aparte.

Ser inteligente o no es muy difícil averiguarlo a simple vista. Eso hay que demostrarlo. Durante la “pandemia del COVID-19” del 2019, miles de personas salían al balcón de sus casas a las 20 h. para aplaudir a los médicos, enfermeras/os y gente relacionada al cuidado de los que cuidaban de los enfermos por ese virus. Era un espectáculo patético. Yo me asomaba cada día para ver cuántos idiotas salían a aplaudir.

Ya de adolescente no encontraba ninguna razón para aplaudir a nadie. Pues todos hemos hecho cosas poco o nada éticas en el pasado o las seguimos haciendo.

Aplaudir a un gremio de gente que se dedica a la medicina, como si eso tuviese mucho mérito y, no hacérselo a todos los demás es de imbécil, pues la gente que cultiva alimentos que sin ellos estaríamos muertos, a los ganaderos que crían animales para alimentarnos, a los pescadores, a los mecánicos que arreglan los coches y camiones que sin ellos no podrían repartir, así como los chóferes. En fin, La lista es demasiado larga. Con esto quiero decir que todos dependemos de todos de alguna manera. Sin delincuentes la policía iría al paro, si no existiera gente desempleada, la gente que trabaja en la INEM estaría en el paro. Como ya he dicho antes, todos formamos parte de un todo y no podemos sobrevivir mucho tiempo en soledad. Entonces ¿por qué salir al balcón a hacer el canelo? Ese gesto es demostrar a los demás lo tonto que eres. Si realmente eres tonto ¿para qué demostrarlo?

4/02/2021