El Congreso aprueba por amplia mayoría la ley de eutanasia

La proposición de ley que regulará el «derecho a morir» como una «prestación» del Sistema Nacional de Salud pasará ahora al Senado

Illa se compromete a hacer efectiva «la prestación de ayuda a morir cuanto antes»

María Luisa Carcedo, «autora intelectual» de la ley de eutanasia ABC | Vídeo: EP

Laura Daniele

Actualizado 18/12/2020  

En un pleno «ad hoc» forzado por el Partido Socialista, el Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves por una amplia mayoría la proposición de ley orgánica de regulación de la eutanasia , que convertirá el «derecho a morir» en una «prestación» del Sistema Nacional de Salud (SNS).

Con 198 votos a favor (PSOE, Podemos, BNG, ERC, Junts per Catalunya, Más País, Bildu, PNV, CUP, Ciudadanos), 138 en contra (PP, Vox, UPN) y dos abstenciones (CDC y Teruel Existe), la nueva norma ha conseguido sortear la primera etapa de su tramitación parlamentaria. Solo PP y Vox han liderado una oposición clara a esta ley que convertirá a España en el sexto país del mundo y el cuarto en Europa en legalizar la eutanasia.

Durante el debate parlamentario, la ponente de esta ley, la diputada socialista María Luisa Carcedo, defendió que la nueva normativa es «un avance en derechos civiles, que traerá más libertad a los ciudadanos» y en ningún caso se trata de «una imposición del Estado». «Es el paciente el que decide, la ley solo establece las condiciones y los procedimientos en los que ese nuevo derecho a morir podrá ejercitarse», apuntó.

Carcedo carga contra el Comité de Bioética

La exministra de Sanidad además salió a la defensiva ante las críticas de PP y Vox sobre el nulo debate social y audiencia pública que los partidos de la coalición de Gobierno y sus socios han dado a los expertos en Bioética y cuidados paliativos durante la tramitación de la ley.

«Claro que nos hemos leído el informe del Comité de Bioética pero da la impresión que ellos no se han leído la ley», afirmó la diputada socialista María Luisa Carcedo

De hecho el Comité de Bioética (CBE) rechazó por unanimidad y sin votos particulares la proposición de ley, al concluir que «existen sólidas razones sanitarias, éticas, legales, económicas y sociales para rechazar la transformación de la eutanasia en un derecho subjetivo y en una prestación pública».

Sin embargo, Carcedo -sin más argumento que «la gran demanda social» que tiene la regulación de la eutanasia entre los ciudadanos- achacó el informe desfavorable de este comité a su desconocimiento del articulado de la nueva norma. «Claro que nos hemos leído el informe del Comité de Bioética pero da la impresión que ellos no se han leído la ley», apuntó.

El Gobierno tiene mucha prisa por poner en marcha esta «prestación de ayuda a morir» que ha tramitado en el Congreso en tiempo récord y en plena pandemia. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, volvió a confirmar esta premura, al comprometerse personalmente este jueves ante la Cámara Baja a trabajar para que la nueva prestación «se haga efectiva en el Sistema Nacional de Salud cuanto antes».

«Sin un acceso universal a los cuidados paliativos no hay posibilidad de elección, ni libertad porque lo único que se ofrece a los pacientes es la eutanasia», afirmó el diputado popular José Ignacio Echániz

La proposición de ley que continuará ahora su tramitación en el Senado será la menos restrictiva de todas las que existen. España además se convertirá en el único país de Europa con una «prestación de ayuda a morir», pero sin un acceso universal a los cuidados paliativos. Luxemburgo, Bélgica y Holanda -los únicos países europeos que tienen regulada la eutanasia – superan ampliamente a nuestro país en la cobertura de esa atención sanitaria.

Ante esta realidad, el diputado popular José Ignacio Echániz recordó al Gobierno que sin un acceso universal a los cuidados paliativos «no hay posibilidad de elección, ni libertad porque lo único que se ofrece a los pacientes es la eutanasia». «El nivel de civilización y madurez de un país se mide por cómo trata a los más vulnerables. Responder con la eutanasia a la deuda que nuestra sociedad ha contraído con sus personas mayores y sanitarios no parece el mejor camino de la responsabilidad, la solidaridad intergeneracional, ni la mínima solidaridad social y política», aseveró.

La diputada por Vox, Lourdes Méndez comparó la ayuda médica a morir con la «eugenesia», y acusó al Gobierno y a los partidos que votaron a favor de «firmar sentencias de muerte para los más débiles». «Cuando acabe este debate, señorías de la izquierda radical, comunistas, separatistas, herederos del terrorismo, oportunistas, diputados enemigos de España y de los españoles se aplaudirán mutuamente con una sonrisa cruel y acartonada oculta en sus mascarillas», aseveró. «Hoy levantarán su copa por haber quebrantado la esencia del orden social y democrático, que es el derecho a la vida», añadió.

Supresión del Comité de Evaluación

Formaciones como ERC, EH Bildu, BNG o CUP, aunque han mostrado su apoyo a la norma, siguen pensando que es «insuficiente» y, por ello, han mantenido vivas en este debate varias enmiendas que, finalmente, no se han aprobado. Estas formaciones han hablado, por ejemplo, de extender el derecho a menores a partir de los 16 años, considerar el cansancio vital para pedir el suicidio asistido, o la supresión o simplificación de los Comité de Evaluación y Garantía, entre otras.

El debate del Congreso fue vehemente y con continuos recuerdos a iconos de la defensa de la eutanasia en España como Ramón Sampedro. También se mencionó al doctor Luis Montes, de la Asociación Derecho a Morir Dignamente, o Ángel Hernández, que ayudó a morir a su mujer, María José Carrasco, con una esclerosis múltiple muy avanzada.

Tras la luz verde otorgada este jueves por el Congreso, la proposición de ley pasará ahora al Senado y es posible que ya no vuelva a la Cámara baja, ya que el articulado de la norma lleva ya incorporadas enmiendas de casi todos los grupos parlamentarios. De ser así, la proposición pasará directamente del Senado al BOE (Boletín Oficial del Estado) y entrará en vigor tres meses después de su publicación. Esto quiere decir que la eutanasia podría ser legal en España a partir de mayo. En caso de incorporar alguna enmienda y regresar al Congreso, su legalización tendría que esperar hasta el mes de junio.

Así será la «prestación de ayuda a morir»

Dos modalidades: eutanasia y suicidio asistido. España se sumará al reducidísimo número de países que permiten las dos modalidades del «derecho a morir»: la eutanasia y el suicidio asistido. Hasta ahora solo era así en Bélgica y Holanda, ya que los pocos países que admiten el «derecho a morir» tiene legalizado uno u el otro. En Luxemburgo, Canadá y Colombia es legal la eutanasia. El suicidio asistido está despenalizado en Suiza, Alemania, Japón y algunos estados de Estados Unidos (Washington, Oregón, Colorado, Vermont, Montana y California) y uno de Australia.

Enfermos crónicos, personas con discapacidad y enfermos psiquiátricos. La eutanasia y el suicidio asistido estarán disponibles en el Sistema Nacional de Salud no solo para los enfermos «terminales o incurables». La discapacidad o una enfermedad psiquiátrica también será un motivo para poder pedir la «prestación de ayuda a morir», ya que la ley reconoce ese derecho a aquellas personas que sufren «un padecimiento crónico e imposibilitante» o «una enfermedad grave e incurable causantes de un sufrimiento físico o psíquico intolerables».

Un año de empadronamiento. Entre los requisitos para poder acceder a la eutanasia se apunta a que bastará con un año de empadronamiento.

En centros privados y también a domicilio. La «prestación del derecho a morir» se podrá realizar en «el domicilio» abriendo la puerta a las residencias y los centros sociosanitarios en caso de que la persona lleve ingresada de manera continuada. Además de los centros del Sistema nacional de Salud también podrá realizarse en los hospitales privados.

Exprés. El espacio de tiempo entre que se presenta la solicitud y se recibe la «prestación de ayuda a morir» será muy corto. Con la ley del PSOE, la eutanasia se aplicará con un tiempo máximo de 32 días.

El médico puede hacer la solicitud. En aquellos casos en los que el paciente «no se encuentre en pleno uso de sus facultades», será «el médico» el que podrá presentar la solicitud de eutanasia a través «del testamento vital o de un documento equivalente legalmente» suscrito por el enfermo con anterioridad.

Muerte natural. La muerte producida derivada de la prestación de ayuda para morir «tendrá la consideración legal de muerte natural a todos los efectos».

15/02/2023