Si te atacan contraataca
En toda lucha se pretende ganar al adversario, por ese motivo se ha de discurrir la manera de lograrlo.
En muchas ocasiones el enemigo va mejor equipado: lleva chaleco antibala, casco con visera y protector de cuello, porras, escudos, rodilleras, guantes, etc. Mientras que los demás van con ropa de calle, entonces…¿cómo vencerlo?
Pues como se hace en la guerra: Por mayoría de individuos o por atacarlos por sorpresa. Las hormigas a pesar de su diminuto tamaño logran vencer a los animales miles de veces mayores que ellas.
Por el factor sorpresa: ¿Se acuerdan de la película Pearl Harbor?. Los japoneses ganaron esa batalla a pesar de poseer menos infraestructura que los yanquis. Pues de eso se trata, hay que usar el ingenio. Ninguna comisaría de policía se esperaría un ataque con granadas rompedoras o bazucas o como hacen en algunos países de Oriente, utilizan gente con explosivos adosados al cuerpo. Pero hay una forma muy eficaz y más sencilla de romper la barrera policial; basta con llenar botellas con ácido sulfúrico y hacerlas volar. Ya puestos a lanzarles ácido, existe una combinación de ellos llamados superácidos que son la leche.
Sus trajes y protecciones no lo resisten, tampoco aguantan las granadas. Todo eso no lo esperan de unos manifestantes. Claro, que si pudiésemos contar con par de rifles barret, la batalla está ganada por goleada. Esos trastos no dejan nada en pie, o como mínimo, los deja como un queso de Gruyer. Son capaces de destrozar cualquier vehículo en unos instantes. Pero para utilizar esas cosas hay que tener un buen par de…¿los tienes?
Rubén Marco
