por Antonio José Paz Cardona en 5 noviembre 2018

  • El estudio de este problema es reciente en Colombia y lleva poco menos de tres años tomando fuerza. Algunos académicos consideran que puede ser uno de los principales problemas de pérdida de diversidad de fauna a nivel mundial.
  • Las especies más atropelladas son la zarigüeya, la ardilla de cola roja, el oso mielero, el gallinazo negro y el zorro cangrejero. El reto está en considerar los pasos seguros de fauna dentro del diseño de las nuevas carreteras y la ampliación de las antiguas.

En España se reportan anualmente cerca de 30 millones de casos de animales atropellados, contando solo los vertebrados. La tasa en Estados Unidos es de un millón de atropellamientos al día, es decir, 365 millones al año; mientras que Brasil reporta 475 millones de casos anualmente. Estas cifras muestran una grave problemática a la que se le debe prestar atención. Algunos científicos, incluso, ya dicen que la muerte de animales como consecuencia de atropellamientos en las vías puede considerarse como uno de los principales problemas de pérdida de diversidad de fauna a nivel mundial.

Hasta hace unos años el tema era poco estudiado, pero cada vez más se ha vuelto relevante para los académicos. En Colombia, el estudio sistemático de este fenómeno empezó con fuerza hace casi tres años y aunque todavía falta vincular muchas concesiones viales a lo largo y ancho del país, los datos que se han recopilado han servido para hacer los primeros análisis de lo que está pasando.

Registro de mortalidad de fauna silvestre por colisión vehicular en la carretera Toluviejo – ciénaga La Caimanera, Sucre, Colombia

Jaime De La Ossa-V. y Silvia Galván-Guevara

El presente trabajo evalúa la mortalidad accidental debida a atropellamiento de fauna silvestre en la carretera que va desde el poblado de Toluviejo a la ciénaga de La Caimanera, departamento de Sucre, Colombia. Esta atraviesa una porción de los Montes de María, pasando por sabanas antrópicas hasta llegar a una zona de manglares en la costa Caribe. Se registraron 431 individuos atropellados, de 31 especies: mamíferos 28,1 %

(121), aves 28,8 % (124), reptiles 21,8 % (94) y anfibios 21,3% (92). Específicamente las especies con más atropellamientos fueron: el zorro cangrejero, Cerdocyon thous, con el 10,9%, la Iguana común, Iguana iguana, un 10,8 %, el garrapatero aní (Crotophaga ani) el 9,5 %, el Tamandua mexicana, el 7,7 % y la zarigüeya común (Didelphis marsupialis) el 6,1 %. La tasa de atropellamiento fue superior en todos los casos, tanto de manera general como específica, al compararla con trabajos relacionados.

La vía analizada no presenta señalización para la protección de la fauna silvestre, carece de iluminación, está construida en su totalidad en asfalto y en relativo buen estado. La tasa de atropellamiento está relacionada con factores como flujo vehicular, ancho de la vía, comportamiento de las especies, cobertura vegetal y velocidad, siendo todas de gran importancia y de amplia frecuencia en los atropellamientos detectados.

Mortalidad de fauna silvestre por atropellamientos en el bosque atlántico del Alto Paraná, Argentina.

La expansión de las redes de transporte es una de las mayores amenazas a la biodiversidad, provocando, entre otras cosas, un aumento en el riesgo de mortalidad por accidentes para la fauna. El objetivo del presente trabajo es evaluar los atropellamientos ocurridos entre los años 2012 y 2016 en un tramo de 34 km sobre la ruta Nacional N°12, en el bosque atlántico del Alto Paraná (Argentina). Este tramo atraviesa varias reservas naturales y soporta un flujo turístico masivo. Se comparó el número de atropellamientos entre estaciones del año, tipo de cobertura vegetal y presencia de áreas protegidas, utilizando modelos lineales generalizados mixtos. Se mapeó la distribución de los accidentes para identificar sitios críticos. Durante los 47 meses del estudio, detectamos 1784 ejemplares atropellados: 67.5% mamíferos, 25.2% aves y 7.3% reptiles. La especie con más accidentes registrados fue la comadreja overa (Didelphis albiventris), seguida del lagarto overo (Tupinambis merianae) y el alicuco común (Megascops choliba). Solamente los reptiles mostraron diferencias significativas en los atropellamientos por estación. El 72.6% de los accidentes ocurrieron en zonas con presencia de bosque nativo. A su vez, el 70.7% de los accidentes ocurrió dentro de áreas protegidas. Se identificaron 13 kilómetros críticos donde se propone la aplicación de medidas, como la colocación de reductores de velocidad y la adecuación de estructuras de desagüe de arroyos como pasafaunas subfluviales. Una vez implementadas las medidas propuestas, debería evaluarse su efectividad a largo plazo.

Medidas que han resultado ser poco útiles para evitar que mueran millones de animales