Hoy será un día agitado. El equipo de fauna de la Gerfor ha coordinado un operativo junto con la Fiscalía Especializada en Materia Ambiental (FEMA) de Madre de Dios, y la Policía. El principal objetivo es un grupo de restaurantes al paso que anuncian en sus pizarras la venta de platos preparados con picuro y sajino.

Letreros de restaurantes en la zona de La Merced anuncian en su carta animales como el picuro y el sajino. Foto: ©Adrián Portugal Teillier.

La Ley forestal y de fauna silvestre, emitida en 2001, prohíbe la comercialización de carne de animales silvestres, o “carne de monte”, por lo que cada cierto tiempo se realizan estos operativos para evitar su venta y consumo.

Roxana Cachique, ex funcionaria del área de Fauna Silvestre de la Gerfor-Madre de Dios, lidera el operativo en los restaurantes del barrio de La Merced. Ella explica a las cocineras de manera didáctica y severa a la vez: el primer decomiso viene con una amonestación verbal y queda registrada la persona. Si se le interviene por segunda vez en la misma falta, le corresponde una multa. Y si reincidiera una tercera vez, se le abre una investigación.

Antes de la emisión de la Ley de Fauna Silvestre, en esta zona comer estas especies era común. Actualmente solo es permitido el consumo de animales silvestres en las comunidades nativas, siempre y cuando se lleve un registro y control de la cantidad de animales cazados y consumidos por cada comunidad. Debe ser para consumo personal o familiar, mas no para la comercialización.

Decomiso de carne de sajino que se ofrecía en una pescadería cercana al Mercado Central. Foto: ©Adrián Portugal Teillier.

La liberación

Ayudar a alguien a ser libre da una sensación difícilmente igualable. Esta es la parte más feliz de su trabajo, coinciden Roxana Cachique y Alex Chipana, que por esos días de mayo se ocuparon de terminar el proceso de protección con la liberación de algunas especies rescatadas. Luego de ser recibidos y evaluados en los albergues como Amazon Shelter y Taricaya, boas, monos, achunis y puercospines están listos para ser nuevamente libres en la selva.

Taricaya Reserva Ecológica es también un eslabón importante en la cadena de protección de los animales en Madre de Dios. Sostenido por Fernando Rosemberg y Rachel Killby, es una Concesión de ecoturismo que alberga muchas especies rescatadas del tráfico ilegal.

Una mujer entrega un achuni o coatí al equipo de Fauna de la GERFOR. Ella explicó que el animal llegó hace 15 días a su hogar y lo acogió como mascota, pero al ser consciente de la prohibición de tener animales silvestres en casa llamó a la autoridad para entregarlo. Foto: ©Adrián Portugal Teillier.

Muchos de los voluntarios que trabajan allí son estudiantes de veterinaria. Antes de la pandemia, la mayoría eran turistas extranjeros, cuyo pago sostenía los gastos de manutención de los animales.

El achuni o coatí, que hace pocas horas fue entregado por una ama de casa en la ciudad, será liberado ese mismo día en el monte, a una distancia prudente de Taricaya.

El coatí no necesita entrenamiento o readaptación en un centro de rescate porque busca su alimento instintivamente, a diferencia de los monos, que pueden llegar a acostumbrarse a ser alimentados por los humanos.

Rachel y Álex alimentan al coatí, momentos previos a su liberación. Foto: ©Adrián Portugal Teillier.

 

https://es.mongabay.com/2021/08/trafico-de-especies-amazonia-madre-de-dios-reportaje-fotografico/

29/08/2021