Ejercicio en pastillas
Josep Corbella | Barcelona | 03/08/2008
Engañar al cuerpo humano para que crea que ha hecho ejercicio y obtenga los beneficios de la actividad física, como quemar grasas y controlar el nivel de azúcar en la sangre, puede ser posible tomando el fármaco Aicar, que se había desarrollado para tratar una enfermedad cardiaca, según una investigación del Instituto Salk de California (EE. UU.) presentada esta semana en la revista científica Cell.
Un segundo fármaco llamado GW1516, aún en fase de desarrollo experimental, se ha mostrado capaz de aumentar la resistencia al esfuerzo y multiplicar los beneficios de la actividad física.
Pero a diferencia del primer fármaco requiere que se haga ejercicio para aportar beneficios.
«Si uno no está en forma y quiere cambiar, tiene que hacer ejercicio. La manera que tenemos los adultos de reprogramar nuestros músculos es entrenando», ha declarado en un comunicado Ronald Evans, director de la investigación. Lo que ha hecho el equipo de Evans es inducir con fármacos la misma reprogramación del tejido muscular que se consigue con la actividad física. Evans es considerado un líder mundial en esta área de investigación y ya ha ganado el premio Albert Lasker, considerado la antesala del Nobel de Medicina.
Los experimentos presentados en Cell se han realizado con ratones pero, dado que el metabolismo de los ratones y su adaptación a la actividad física está regulado por los mismos genes que el humano, Evans cree que sus resultados pueden ser útiles para mejorar el tratamiento de algunas enfermedades.
De confirmarse que los fármacos investigados tienen los mismos efectos en las personas, y que sus beneficios son superiores a sus efectos secundarios (algo que aún no se ha estudiado), podrían ser útiles para tratar la pérdida de masa muscular en personas enfermas o mayores que no pueden hacer ejercicio con la misma intensidad que personas más sanas o jóvenes. En este sentido, podría ser especialmente útil el fármaco Aicar, que ha mostrado efectos beneficiosos incluso en ratones sedentarios. Los fármacos también podrían ser útiles para el tratamiento de la diabetes, del sobrepeso y de la obesidad.
Pero también podrían ser utilizados – especialmente el GW1516 desarrollado por la compañía GlaxoSmithKline- por deportistas motivados por mejorar su rendimiento. El GW 1516 se ha mostrado capaz de aumentar la resistencia de los ratones al esfuerzo en un 77% y la cantidad de fibras musculares de tipo I (las más eficientes y más abundantes en los maratonianos) en un 38%.
Para evitar el uso fraudulento de estos fármacos, los investigadores del Instituto Salk ya han desarrollado pruebas analíticas que los detectan en sangre y en orina. Según informa la agencia Bloomberg, el Instituto Salk está trabajando con la Agencia Mundial Antidopaje para empezar a aplicar los análisis este verano en los Juegos de Pekín.
https://tudeudaconelplaneta.es.tl/Perder-peso%2C-3%AA-parte.htm