Esa cita fue célebre durante muchos años. Kennedy se aprovechó de las mentes idiotizadas de millones de americanos. Los gobernantes reciben una suculenta paga todos los meses por dirigir su país y proporcionar bienestar a sus ciudadanos. En cambio los ciudadanos no reciben nada por cuidar a su país. Más bien es todo lo contrario. No reciben más que sablazos por parte de su gobierno; ya sea pagando impuestos absurdos o con prohibiciones absurdas. También cada vez con más restricciones en sus libertades.
Esa frase es para desentenderse de sus obligaciones. Lo mismo sería que en un partido de fútbol se contrata a los árbitros para que vigilen que los jugadores respeten las reglas del juego y el presidente le dijera que mire para otro lado cuando vea que no juegan como deberían. No señor, eso sería el caos, se haría imposible seguir jugando si se da carta blanca a los jugadores o si ellos se dan cuenta de que el árbitro no sanciona las faltas. El partido se convertiría en un campo de batalla donde la ley sería de; todo vale. Así pues, no se puede derogar el trabajo de los gobernantes a los ciudadanos. A esa gente se le paga muy bien para que solucione los problemas. Si no saben, pues que no se presenten como candidatos.
21/08/2021
