Piensos esterilizantes para palomas… la ‘incompetencia al poder’

Pedro Burruezo se hace eco en este artículo de opinión de un informe de SEO/BirdLife que reitera su demanda de no usar piensos esterilizantes para el control de la población de palomas… por ineficaces y no selectivos.

Miércoles 14 oct 2020

Según SEO/BirdLife, “el uso de piensos esterilizantes para el control de las poblaciones de palomas en las ciudades es una práctica que se está extendiendo cada vez más. El argumento para usarlos se basa en la idea de que es un método más ético que los tradicionalmente usados, como la captura de ejemplares, pero su eficacia no está demostrada.

En los últimos años, SEO/BirdLife se ha puesto en contacto con varios ayuntamientos, como el de San Cristóbal de La Laguna (Tenerife), Barcelona,  Valencia y Palma, para informar sobre el riesgo del método y ofrecer apoyo para buscar alternativas más eficientes y selectivas”.

Un método no selectivo

En la sociedad moderna, el Estado nos dice que no tenemos nada que temer: todo está controlado. Expertos en salud, en ciencia, en tecnologías… llevan las riendas de todo para tranquilidad de la ciudadanía. Pero todo es falso. Nada está bajo control. Vivimos, más que nunca, bajo las normas del azar.

No ocurren más desastres porque la Providencia es compasiva. El ejemplo de los piensos esterilizantes para palomas es un ejemplos más, pero emblemático. No sirven para nada. No son selectivos. Esterilizan a otras especies. Son altamente contaminantes. Los de la entidad citada lo tienen claro: “El uso de pienso con esterilizantes no se puede considerar un método selectivo, puesto que éste se dispone en dispensadores a los que pueden tener acceso cualquier otra especie de ave u otros animales.

Además, este sistema hace muy difícil controlar la cantidad del compuesto que ingiere cada individuo y existe el riesgo de contaminación secundaria sobre las aves y otros animales que depredan palomas, como el halcón peregrino”. Y, verazmente, los de SEO/BirdLife son más expertos en asuntos de aves que cualquier otra entidad. Y lo más importante: no tienen intereses comerciales en el asunto. ¿Quién se está lucrando con esos piensos tan dañinos?

Obsesión esterilizante

El ser humano moderno tiene una obsesión esterilizante: crea semillas estériles, produce químicos que acaban con la fertilidad, obliga a esterilizar a poblaciones indígenas, promueve la no descendencia… Y aplica también todo eso a la fauna silvestre. No deja a la Naturaleza actuar. No promueve métodos no invasivos. La utilización de químicos esterilizantes es un método muy peligroso.

Desde SEO/BirdLife nos dicen: “Aplicando el Principio de Precaución, antes de introducir compuestos químicos de este tipo en el medio ambiente, es imprescindible disponer de información científica consolidada sobre su posible impacto acumulativo en otras especies y en el ecosistema. El producto más comúnmente usado, la nicarbacina, está considerado como un medicamento de uso veterinario y no como biocida y, como tal, no está concebido para su uso masivo en el medio ambiente.

Por el momento, no existe suficiente información científica contrastada que permita garantizar un uso seguro de la misma y, por tanto, debería prevalecer este principio”. Pero las autoridades competentes, en base a no sabemos qué juicios de qué expertos, siguen utilizando estos químicos tóxicos poniéndonos en peligro a todos. Alguien tiene intereses en el asunto y hace prevalecer estudios amañados sobre estudios independientes. Siempre es lo mismo…

Efectos indeseados

Los de la ONG continúa: “Por otra parte, el uso de quimioesterilizantes requiere su ingestión continua y en dosis controladas en el tiempo, puesto que su efecto desaparece si cesa la ingesta por un periodo determinado. En consecuencia, la realización de una campaña puntual y sin control de la dosis ingerida por individuo no garantiza su efectividad a largo plazo.

El estudio [1] del Museo de Ciencias Naturales de Barcelona y la Agencia de Salud Pública es concluyente en cuanto a la ineficacia de este método para el control de la población de palomas y desaconseja su uso”. Pero es que, además, sabemos que estos productos son disruptores hormonales. Y que actúan de forma poderosa sobre los sistemas hormonales de los seres vivos. Otras aves y/o animales que cazan palomas podrían estar siendo contaminadas con estos productos. Al final, un mar de esterilidad y de confusión hormonal se ceba una vez más a dos pasitos de casa. ¿No se trataba de repensar nuestras ciudades y de volver a introducir la Naturaleza en ellas? Si nos dejamos guiar por estos pseudoexpertos, acabaremos todos estériles, momificados y regurgitando asfalto.

https://www.ecoticias.com/naturaleza/205412/Piensos-esterilizantes-palomas-incompetencia-poder

18/12/2020