La contaminación atmosférica provoca más de tres millones de muertes al año
A nivel global, la fuente principal es la calefacción doméstica, seguida por la producción agrícola y el tráfico.
21 de septiembre de 2015
En el mundo se registran más de 3,2 millones de muertes prematuras al año a causa de la contaminación del aire que respiramos, una cifra que estaría destinada a duplicarse en el año 2050. El principal culpable es el material particulado fino o PM 2,5, que se compone de partículas sólidas o de gotitas de líquido de diámetro inferior a 2,5 micrómetros presentes en la atmósfera. Estas pueden penetrar hasta nuestros pulmones y causar diferentes problemas de salud. Así lo afirman investigadores del Instituto Max Planck para la Química en Mainz y la Escuela de Salud Pública de Harvard en Boston en un estudio publicado en la revista Nature.
A nivel global, la principal fuente de contaminación atmosférica sería de tipo doméstico, debido al combustible utilizado para calentar hogares y para cocinar, así como para la eliminación de los residuos. Los cálculos de los investigadores sugieren que este tipo de polución sería responsable del 32 por ciento de las muertes prematuras en China y de entre el 50 y 70 por ciento en la India y otros países asiáticos.
Según Jos Lelieveld, del instituto alemán y principal autor del trabajo, y sus colaboradores (que han desarrollado un modelo que combina datos demográficos, registros sobre la química de la atmosfera y estadísticas nacionales sobre el estado de salud de diferentes poblaciones) el problema sería particularmente grave en Asia. En cambio, en Europa y Estados Unidos es menos dramático gracias a una serie de cambios normativos que, en las últimas décadas, han mejorado sustancialmente la calidad del aire.
Con todo, lo que más sorprende es saber que la segunda actividad que más contribuye a la producción de material particulado fino es la agricultura, mediante la transformación de amoníaco en partículas de nitrato y sulfato de amonio a partir del empleo de fertilizantes en las explotaciones ganaderas. Esta fuente de contaminación sería la principal causa de mortalidad prematura en Rusia, Turquía, Corea y Japón, así como en el este de los Estados Unidos y en Europa, en donde puede llegar a provocar hasta un 40 por ciento de estas defunciones.
Finalmente, el tráfico ocuparía el tercer lugar de esta clasificación, con contribuciones diferentes según las distintas regiones del planeta. En los EE.UU., Reino Unido y Alemania sería responsable del 20 por ciento de las muertes prematuras por PM 2,5, aunque a nivel mundial representa solamente el 5 por ciento. Cabe remarcar que, en un artículo de opinión sobre el estudio, Michale Jerrett, profesor de ciencias ambientales de la Universidad de California en Los Ángeles, ha señalado que, a la luz de otros trabajos realizados a escala local, es posible que la investigación de Lelieveld y sus colaboradores haya sobreestimado la contribución de las fuentes agrícolas y subestimado la del tráfico.
Por otro lado, otro grupo de científicos estudió el problema de las muertes prematuras en Brasil causadas por la contaminación atmosférica debida a los incendios intencionales destinados a deforestar su territorio. Según publicaron en un artículo de la revista Nature Geoscience, la reducción del 30 por ciento de estos fuegos entre los años 2004 y 2012 permitió salvar de 400 a 1700 personas por año de muerte prematura.
Más información en Nature y Nature Geoscience
Fuente: Le Scienze
11/03/2021