Actualizado 5 Agosto 2022, 10:41
Javier Pastor @javipas
El hemisferio norte se está enfrentando a un verano especialmente caluroso, y a las altas temperaturas se le suma el problema de los costes energéticos, que no paran de subir. La situación podría agravarse debido a la Guerra de Ucrania, y en España el Gobierno ha tomado una decisión singular para tratar de contener la situación. No es el único país europeo en hacerlo, pero eso tiene implicaciones.
Nada de bajar de 27 grados. Esta semana Pedro Sánchez anunció un paquete de medidas para el ahorro y la eficiencia energética. Con ellas se obliga a comercios, hoteles o edificios públicos (hay excepciones lógicas) a limitar a 27 grados el uso del aire acondicionado en verano (y a 19 grados la calefacción en invierno).
La medida estará vigente hasta al menos noviembre de 2023, y Teresa Ribera aseguró que «no nos podemos permitir perder ningún kilovatio hora». Las multas para quien no cumpla pueden llegar a los 100 millones de euros. También se obliga a los comercios a apagar escaparates y sistemas de iluminación exteriores a partir de las 22 horas y a mantener puertas cerradas para evitar el derroche energético.
Europa entona el ‘winter is coming’. Las medidas anunciadas en España no son las únicas que se están anunciando en países europeos. Ursula von der Leyen recomendaba tomar medidas para reducir la demanda de gas «y prepararnos para el invierno». Las instituciones europeas ya han puesto en marcha medidas como la reducción del uso del aire acondicionado, desplazamientos en bicicleta o teletrabajo.
La Guerra de Ucrania y la dependencia del suministro del gas ruso han provocado que otros estados de la Unión Europea hayan comenzado también a prepararse para lo peor. No solo para combatir el frío invernal, sino para luchar también contra un calor para el que gran parte de Europa no estaba preparada. Las medidas son diversas, y los ejemplos, variados.
Francia. De momento las medidas están menos orientadas a entidades públicas y más a privadas. Así, las tiendas deben tener sus puertas cerradas o se enfrentarán a multas de 750 euros, y también deberán dejar de usar señales luminosas en cuanto cierren, además de reducir la intensidad de la iluminación. El plan de «sobriedad energética» de Macron tiene como objetivo reducir más del 10% el consumo energético en los próximos dos años.
Alemania. El país germano está apagando la iluminación de sus monumentos y desconectando sus fuentes. Ciudades como Hannover han anunciado sus propias medidas: duchas frías en los polideportivos y piscinas municipales. La dependencia del gas ruso ha impulsado las ventas de radiadores, y el país ha recortado sus importaciones de gas ruso desde el 55% antes del conflicto al 35% actual.
Grecia. El país, que tiene una fuerte dependencia del gas ruso —el 40% de su suministro llega de allí— anunció en junio la «operación termostato» para lograr reducir en un 10% el consumo energético este año. El aire acondicionado no podrá estar a menos de 27 ºC en edificios públicos. Se insta a los trabajadores a que se aseguren de apagar los ordenadores al terminar la jornada, y se ha anunciado un programa de 640 millones de euros para renovar las ventanas y sistemas de calefacción y refrigeración de los edificios.
Italia. Mismas medidas para el aire acondicionado en edificios públicos que en España: desde mayo se ha instado a los organismos a no bajar de 27 ºC (salvo en hospitales) y no subir de 19 ºC en calefacción en invierno. Antes de la dimisión de Mario Draghi como primer ministro su ejecutivo preparó —pero no ejecutó— otra medida extrema: el cierre de las actividades comerciales a las 7 de la tarde. Otra medida singular es la del recorte en iluminación pública hasta en un 40% e incluso se preparan para apagones en casos de escasez grave de suministro.
Usando mejor el aire acondicionado. Lo cierto es que estas medidas efectivamente permiten reducir el consumo energético, y de hecho los expertos recomiendan que el aire acondicionado no se ponga a temperatura demasiado baja. Un experto indicaban en Maldita.es cómo además de mantener los motores y filtros en buen estado de limpieza, «lo mejor es dejarlo de manera continúa a 25 º-26 ºC que bajar a 19º y quitarlo y poner según tengamos frío o calor».
No solo eso: «La diferencia máxima recomendada entre el exterior y el interior no debe superar los 12 ℃. Esto supone que en los peores días del verano (34-38 ℃) estaríamos cubiertos con la horquilla de 24 a 26 ℃”. No enfriaremos la casa más rápido por poner temperaturas más bajas, y además se producen consumos excesivos e innecesarios al hacerlo.
3 Comments
Rubén Torres
2 años agoDesde que Pedro Sánchez ganó las elecciones yo ya sabía que ese descerebrado la iba a liar parda. Y no me equivoqué en absoluto, envió al paro a miles de personas gracias a su genial idea de difundir una pandemia falsa y saltándose la Constitución al obligarnos un largo confinamiento.
Pero es que ahora nos quiere vetar de estar fresquitos al impedir que los comercios bajen de 27ºC. ¡Qué locura! Cuando para mí 15-16ºC es lo ideal.
El tema de la energía lo he explicado tantísimas veces que paso de vlver a repetir una y otra vez cómo se soluciona. Basta con buscar el apartado de la energía para saber varias formas de conseguir tanta energía eléctrica como se desee. Pero eso no lo difunden por TV. Por esa razón creé este blog.
Qué será lo siguiente ¿Restricciones de agua? Porque una vez más ese tema hace varias décadas que expliqué cómo conseguir tanta como se quiera.
La Guerra de Ucrania y la dependencia del suministro del gas ruso han provocado que…
R. La frase está muy mal construida; pues debería decir: Gracias que tenemos unos políticos descerebrados que no saben hacer una o con un canuto, los españoles pagaremos las consecuencias por un déficit de energía.
para luchar también contra un calor para el que gran parte de Europa no estaba preparada.
R. Por supuesto que de tener al mando las personas adecuadas, Europa estaría preparada para afrontar tanto las altas temperaturas como las bajas. Pues tenemos suficiente tecnología para ello. Pero una vez más imperan los descerebrados que no saben solucionar nada., más bien solo saben empeorar la situación.
ha anunciado un programa de 640 millones de euros para renovar las ventanas y sistemas de calefacción y refrigeración de los edificios.
R. Grecia tampoco se libra de pertenecer al grupo de los descerebrados, pues con todos esos millones y aplicando las nuevas leyes que llevo varios años proponiendo, se podrían construir fábricas de generadores donde todo el mundo se podría generar su propia energía eléctrica y no tener que pasar ni frío ni calor. Al menos en sus hogares, comercios y puestos de trabajo
Viendo este artículo podemos apreciar sin lugar a dudas de la existencia de una verdadera pandemia; de descerebrados. A los italianos se les ocurrió una “genial idea”; el cierre de las actividades comerciales a las 7 de la tarde.
Venga señores, a ver a quién se le ocurre otra gilipollez más gorda. Pues de esta forma al reducir el horario entrarán menos clientes y ganaremos menos, pero eso sí, los impuestos serán los mismos o en aumento. ¡Viva! Así podremos tener una vida más precaria si cabe.
sipepe
2 años ago4 Ago., 12:20
Lo que tenemos es un gasto en subnormales muy pero que muy por encima de nuestras posibilidades.
angelminarrogomez3
2 años ago4 Ago., 12:11
Estos son los que pretenden forzosamente electrificar el parque automovilístico en unos años pero subes el aire acondicionado y se cagan, unos genios.