A pesar de que pueden ser causa tanto de sequías como de inundaciones en España se está alterando el clima a voluntad -y sin control estatal real- utilizando cañones que emiten ondas sónicas. Así se desprende de la denuncia presentada en el Senado por Carles Mulet, miembro de la coalición nacionalista Compromís, según la cual en nuestro país hay «una proliferación incontrolada de cañones sónicos para deshacer tormentas a cañonazos». Hablamos de «cañones» que mediante explosiones de gas acetileno y aire emiten ondas de choque sónicas que impiden que en las nubes se forme granizo duro y si ya lo hay que se convierta en granizo blando o lluvia. Según asevera está pasando al menos en Tarragona, Valencia y Castellón y van a investigar si también en otras provincias.
El Gobierno se ha limitado a responder que «no le consta» que en los últimos años la Confederación Hidrográfica del Júcar haya otorgado autorización alguna para «/a modificación artificial de la fase atmosférica del ciclo hidrológico, ni consta la realización de ninguna campaña de esta índole» agregando que para ello «es preciso obtener una autorización del actual Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico» lo que requiere «la emisión de informes preceptivos por parte de la Agencia Estatal de Meteorología y, en su caso, de la Administración Sanitaria competente cuando se pretenda el uso de productos o formas de energía con propiedades potencialmente adversas para la salud». El senador añade: «Estas prácticas nos parecen muy peligrosas y es inconcebible que ante el revuelo generado no se estén ya desmantelando las instalaciones y sancionando a sus propietarios».
En pocas palabras, se admite que hay ya en España sistemas artificiales capaces de alterar el clima que pueden usarse si algún organismo competente lo autoriza. Lamentablemente el gobierno no explica si ha habido ya o no autorizaciones para hacer eso en otros territorios y épocas. Su respuesta es pues opaca. Para Mulet es necesario aclarar si este método no es causa de las inundaciones que se han vivido recientemente -como las de Vinarós y Alcanar-, de que en otras zonas haya sequía porque no llegan las nubes y cuál es la incidencia en la salud -vegetal, animal y humana- de esta práctica.
Fuente; Revista Discovery Salud. Número 254 – Diciembre 2021
3/11/2022