Políticos nefastos. Cap. 73

Anónimo

Afganistán.
Realmente no puedo imaginar un infierno más negro en la tierra para que nazca una mujer que Afganistán.
Toda mujer afgana nace esencialmente en la esclavitud de por vida.
El 12.6 por ciento de los matrimonios son polígamos, y en alrededor de un tercio de los casos, una mujer ni siquiera sabe que su esposo ha tomado otra esposa
Solicitar el divorcio después de que su esposo tome otra esposa sin su permiso significa que ella perdería «la custodia de sus hijos, el apoyo financiero y el estado familiar». Muchas mujeres simplemente aceptan. El 57 por ciento de las mujeres están casadas antes de los 19 años, el 35 por ciento antes de los 18 años y el 9 por ciento antes de los 15
.
Se informa que del 60 al 80 por ciento de todos los matrimonios en Afganistán son forzados.
Si el esposo de una mujer muere, ella debe casarse inmediatamente con un miembro de su familia o perderá la custodia de sus hijos
Afganistán registró 280 asesinatos por honor desde enero de 2016 hasta diciembre de 2017. 50 casos resultaron en una condena.
Se cree ampliamente que la gran mayoría de los asesinatos por honor en Afganistán no se informan, por razones del terror del autor sobre su familia, a la policía que se niega a registrar el caso.
En un país de 36 millones de personas con una cultura tan ferozmente anti-femenina, el número real es probablemente de miles cada año.
La ley afgana es mucho mejor para absolver o dar palmadas en la muñeca para honrar a los asesinos que para mantener a las niñas seguras en sus hogares, de sus propias familias.
Esta historia es de 2002:
“En un caso ampliamente reportado en marzo de 1999, una niña de 16 años con retraso mental que fue violada en la provincia de la frontera noroeste de Pakistán fue entregada al consejo judicial de su tribu.
Aunque el crimen fue denunciado a la policía y el autor fue arrestado, los miembros de la tribu Pathan decidieron que había avergonzado a su tribu y la mataron frente a una reunión tribal «.
Afganistán tiene tantas historias como esta que es imposible intentar compilarlas.
También desde 2002:
“En abril de 1999, Imran, una mujer casada de 28 años que buscaba el divorcio de su violento esposo después de 10 años de matrimonio, aceptó a regañadientes encontrarse con su madre en una oficina de abogados en Lahore, Pakistán.
La familia de Imran se opuso al divorcio y consideró que buscar un divorcio era vergonzoso para el honor de la familia.
Su madre llegó a la oficina del abogado con un compañero, quien inmediatamente disparó y mató a Imran.
“El padre de Imran, que era presidente de la Cámara de Comercio de Peshawar, presentó una denuncia ante la policía acusando a los abogados del secuestro y asesinato de Imran.
El clero local emitió fatwas (sentencias religiosas) contra ambas mujeres y se prometió dinero a cualquiera que las matara.
“El Tribunal Superior de Peshawar finalmente desestimó el traje del padre.
Nadie fue arrestado por la muerte de Imran.
Afganistán tiene tantas historias como esta que conduciría a un occidental al suicidio tratando de compilarlas.
En este país, la violencia doméstica está presente en casi todos los hogares.
Se necesitaría un hombre con un corazón de oro para nunca golpear a su esposa.
En 2014, el gobierno modificó el código penal para prohibir que los familiares de una esposa testifiquen sobre el abuso físico de su esposo.
En 2017, una mujer afgana intentó quemarse hasta la muerte después de cuatro años de palizas por parte de su esposo, y solo entonces fue encarcelado.
La alfabetización femenina en Afganistán es del 17 por ciento. Sin embargo, antes de la invasión estadounidense, era del 3 por ciento.
Una mujer puede ser asesinada por casi cualquier cosa.
En 2015, esta mujer, Farkhunda Malikzada, que trabajaba como maestra religiosa en una mezquita, discutió con un mulá que vendía amuletos frente a su mezquita.

El mulá la acusó rápida y ruidosamente de quemar el Corán.
Una multitud de bestias enloquecidas la rodeó, la golpeó hasta la muerte con palos y rocas, luego la atropelló con un automóvil, la arrastró por 300 pies (91,44 m.), apedreó su cadáver y le prendió fuego.
La policía estaba allí y no hizo nada.
Hasta que se comprobó que la acusación de blasfemia por parte del mullah era una mentira, tanto las autoridades afganas como los «eruditos» islámicos defendieron su linchamiento.

Momentos de Farkhunda antes de que la multitud la acabara (la asesinaran).
Es imposible para mí concebir a una persona que pueda desgarrar a una mujer miembro por miembro porque escuchó que ella no respetó su libro sagrado.
¡Y ella ni siquiera lo hizo!
20 de los 49 sospechosos fueron condenados a penas de 10 años de prisión a muerte.
Más tarde ese año, todos los condenados a muerte fueron conmutados a 20 años de prisión.
En Afganistán, no hay protección para las mujeres porque no hay una autoridad civilizada e ilustrada.
La policía y los tribunales son tan malos como los aldeanos.
¿Cómo puede un juez sentenciar a muerte a un asesino de honor cuando podría hacerle lo mismo a su propia nieta si ella lo avergonzara?
La combinación de creencias islámicas radicales, feas y el antiguo código tribal de Pashtunwali en poder de prácticamente toda la población significa que una mujer aquí no tiene ninguna posibilidad.
Para ser justos, Pashtunwali es probablemente menos culpable de esto que el Islam, porque incluso los antiguos persas tenían un mejor historial de derechos de las mujeres que los afganos modernos.
En un mundo justo, toda la población femenina de Afganistán sería transportada por avión a la civilización, y todos los hombres serían convertidos en eunucos.

Mary Sue Espiritu

El peor país del mundo, según el estudio de Stateness Index, es Libia, el cual ocupa el puesto 173, es decir, el último. Es considerado como un «Estado colapsado» debido al auge de la guerra, la violación de derechos humanos que ocurre en la región y otras problemáticas sociales y económicas. Los otros países de la lista, los cuales ocupan los últimos lugares, también están calificados como «Estados colapsados» y «Estados defectuosos profundos».

Abigail Orús

9 dic 2022

Países con menor cumplimiento de los DD. HH. y del estado de derecho del mundo 2022

Con una puntuación de índice de 9,9, Yemen se convirtió en el país donde existe un menor cumplimiento de los derechos humanos y del Estado de derecho en 2022. La segunda y la tercera posición la ocuparon, respectivamente, Irán y China.

Según The Fund for Peace, se tomó en consideración un baremo de 0 a 10 para determinar el nível de cumplimeinto de los derecgos humanos en un total de 177 países, donce 0 = nível alto de cumplimiento y 10 = un nivel bajo de cumplimiento.

Jennifer

Afganistán.
Realmente no puedo imaginar un infierno más negro en la tierra para que nazca una mujer que Afganistán.
Toda mujer afgana nace esencialmente en la esclavitud de por vida.
El 12.6 por ciento de los matrimonios son polígamos, y en alrededor de un tercio de los casos, una mujer ni siquiera sabe que su esposo ha tomado otra esposa
Solicitar el divorcio después de que su esposo tome otra esposa sin su permiso significa que ella perdería «la custodia de sus hijos, el apoyo financiero y el estado familiar». Muchas mujeres simplemente aceptan. El 57 por ciento de las mujeres están casadas antes de los 19 años, el 35 por ciento antes de los 18 años y el 9 por ciento antes de los 15
.
Se informa que del 60 al 80 por ciento de todos los matrimonios en Afganistán son forzados.
Si el esposo de una mujer muere, ella debe casarse inmediatamente con un miembro de su familia o perderá la custodia de sus hijos
Afganistán registró 280 asesinatos por honor desde enero de 2016 hasta diciembre de 2017. 50 casos resultaron en una condena.
Se cree ampliamente que la gran mayoría de los asesinatos por honor en Afganistán no se informan, por razones del terror del autor sobre su familia, a la policía que se niega a registrar el caso.
En un país de 36 millones de personas con una cultura tan ferozmente anti-femenina, el número real es probablemente de miles cada año.
La ley afgana es mucho mejor para absolver o dar palmadas en la muñeca para honrar a los asesinos que para mantener a las niñas seguras en sus hogares, de sus propias familias.
Esta historia es de 2002:
“En un caso ampliamente reportado en marzo de 1999, una niña de 16 años con retraso mental que fue violada en la provincia de la frontera noroeste de Pakistán fue entregada al consejo judicial de su tribu.
Aunque el crimen fue denunciado a la policía y el autor fue arrestado, los miembros de la tribu Pathan decidieron que había avergonzado a su tribu y la mataron frente a una reunión tribal «.
Afganistán tiene tantas historias como esta que es imposible intentar compilarlas.
También desde 2002:
“En abril de 1999, Imran, una mujer casada de 28 años que buscaba el divorcio de su violento esposo después de 10 años de matrimonio, aceptó a regañadientes encontrarse con su madre en una oficina de abogados en Lahore, Pakistán.
La familia de Imran se opuso al divorcio y consideró que buscar un divorcio era vergonzoso para el honor de la familia.
Su madre llegó a la oficina del abogado con un compañero, quien inmediatamente disparó y mató a Imran.
“El padre de Imran, que era presidente de la Cámara de Comercio de Peshawar, presentó una denuncia ante la policía acusando a los abogados del secuestro y asesinato de Imran.
El clero local emitió fatwas (sentencias religiosas) contra ambas mujeres y se prometió dinero a cualquiera que las matara.
“El Tribunal Superior de Peshawar finalmente desestimó el traje del padre.
Nadie fue arrestado por la muerte de Imran.
Afganistán tiene tantas historias como esta que conduciría a un occidental al suicidio tratando de compilarlas.
En este país, la violencia doméstica está presente en casi todos los hogares.
Se necesitaría un hombre con un corazón de oro para nunca golpear a su esposa.
En 2014, el gobierno modificó el código penal para prohibir que los familiares de una esposa testifiquen sobre el abuso físico de su esposo.
En 2017, una mujer afgana intentó quemarse hasta la muerte después de cuatro años de palizas por parte de su esposo, y solo entonces fue encarcelado.
La alfabetización femenina en Afganistán es del 17 por ciento. Sin embargo, antes de la invasión estadounidense, era del 3 por ciento.
Una mujer puede ser asesinada por casi cualquier cosa.
En 2015, esta mujer, Farkhunda Malikzada, que trabajaba como maestra religiosa en una mezquita, discutió con un mulá que vendía amuletos frente a su mezquita.

El mulá la acusó rápida y ruidosamente de quemar el Corán.
Una multitud de bestias enloquecidas la rodeó, la golpeó hasta la muerte con palos y rocas, luego la atropelló con un automóvil, la arrastró por 300 pies (91,44 m.), apedreó su cadáver y le prendió fuego.
La policía estaba allí y no hizo nada.
Hasta que se comprobó que la acusación de blasfemia por parte del mullah era una mentira, tanto las autoridades afganas como los «eruditos» islámicos defendieron su linchamiento.

Momentos de Farkhunda antes de que la multitud la acabara (la asesinaran).
Es imposible para mí concebir a una persona que pueda desgarrar a una mujer miembro por miembro porque escuchó que ella no respetó su libro sagrado.
¡Y ella ni siquiera lo hizo!
20 de los 49 sospechosos fueron condenados a penas de 10 años de prisión a muerte.
Más tarde ese año, todos los condenados a muerte fueron conmutados a 20 años de prisión.
En Afganistán, no hay protección para las mujeres porque no hay una autoridad civilizada e ilustrada.
La policía y los tribunales son tan malos como los aldeanos.
¿Cómo puede un juez sentenciar a muerte a un asesino de honor cuando podría hacerle lo mismo a su propia nieta si ella lo avergonzara?
La combinación de creencias islámicas radicales, feas y el antiguo código tribal de Pashtunwali en poder de prácticamente toda la población significa que una mujer aquí no tiene ninguna posibilidad.
Para ser justos, Pashtunwali es probablemente menos culpable de esto que el Islam, porque incluso los antiguos persas tenían un mejor historial de derechos de las mujeres que los afganos modernos.
En un mundo justo, toda la población femenina de Afganistán sería transportada por avión a la civilización, y todos los hombres serían convertidos en eunucos.

Anahí Michel

Antes Maestra de Artes Visuales de Universidad de Bellas Artes (2002–2006)
Existen muchos con una peor calidad de vida y uno de ellos es Gambia La República de Gambia es un país situado en África Occidental y que está rodeado totalmente por Senegal. Se trata de un pequeño estado con una población de 1,7 millones de habitantes que, pese a ser un país con tierras muy fértiles, abundante pesca y encanto turístico, sigue teniendo un IDH bajo de 0,496. Y es que aunque en 2015 se prohibió la mutilación genital femenina, los homosexuales son perseguidos, se dan todavía acusaciones de brujería y no hay libertad de prensa.