Eduardo Olivar
Julio 28, 2023
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Gracias a la ciencia un pez que ya estaba extinto originario de una región michoacana de México ha ¡regresado a la vida! Y su población creció un 55%.
Había una vez un pequeño pez que se llamaba “tequila splitfin” o “zoogoneticus tequila” que nadaba en un río en el Oeste de México, pero desapareció en la década de 1990. Los científicos y residentes, sin embargo, han logrado el regreso de una especie extinta en la naturaleza, conservada en cautiverio, a su hábitat.
Comenzó hace más de dos décadas en Teuchitlán, un pueblo cercano al volcán Tequila. Media docena de estudiantes, entre ellos Omar Domínguez, comenzaron a preocuparse por el pececito que cabe en la palma de una mano y que había desaparecido de las aguas locales. Aparentemente debido a la contaminación, las actividades humanas y la introducción de especies no autóctonas.
Domínguez, ahora investigador de 47 años de la Universidad de Michoacán, dice que entonces sólo los ancianos recordaban el pez llamado “gallito” o “gallo pequeño” por su cola anaranjada.
En 1998, los conservacionistas del zoológico de Chester en Inglaterra y otras instituciones europeas llegaron para ayudar a establecer un laboratorio para la conservación de peces mexicanos. Trajeron varias parejas de peces tequila splitfin de los acuarios de algunos recolectores.
Los peces comenzaron a reproducirse en acuarios y en pocos años, Domínguez y sus colegas apostaron por reintroducirlos en el río Teuchitlán.
Entonces buscaron opciones: construyeron un estanque artificial para una etapa de semi-cautiverio y en 2012 pusieron allí 40 parejas.
El regreso del pez tequila: un gran logro para la comunidad científica
Dos años después, había unos 10 mil peces. El resultado garantizó la financiación, no sólo del zoológico de Chester, sino de una docena de organizaciones de Europa, Estados Unidos y Emiratos Árabes Unidos.
Allí estudiaron los parásitos, los microorganismos en el agua, la interacción con los depredadores, la competencia con otros peces. Y luego los introdujeron en jaulas.
Después fueron marcados para que pudieran ser monitoreados y puestos en libertad. Era finales de 2017 y en seis meses, la población aumentó un 55%. El mes pasado, el pez se había expandido a otra parte del río.
A partir de esto, Domínguez y su equipo ya están comenzando a trabajar en otro pez que se considera extinto en estado salvaje: el “skiffia francesae”.
Cabe recordar que la lista roja de especies amenazadas de la UICN enumera al tequila splitfin como en peligro de extinción. Los ecosistemas de agua dulce en México están bajo la presión de la contaminación, la extracción excesiva de recursos hídricos y otros factores.
Más de un tercio de las 536 especies de peces de agua dulce que se evaluaron en el país están en peligro de extinción, según un informe de 2020 liderado por la UICN y ABQ BioPark en Estados Unidos.
Pero haber regresado a la vida a esta especie de pez extinto es un gran paso para la comunidad científica, no solo de México, ¡sino del mundo!
18/07/2024
1 Comment
Rubén Torres
4 meses agoSi supieran los que utilizan titulares sensacionalistas cuánto los odio dudo que siguieran haciéndolo. Se libran de no poseer el poder adquisitivo para poder darles un buen escarmiento. Pues es la única forma de que esa lacra desaparezca de la faz terrestre.
El caso es que ese cabrón de Eduardo Olivar nos engaña al decir que los científicos han logrado algo insólito; devolver a la vida un animal extinto cuando en realidad es una tomadura de pelo, pues lo único que han hecho es soltar unos peces criados en cautividad, algo muy común que se viene haciendo desde hace varias décadas. Por lo que no tiene relevancia alguna.
Por otra parte encuentro absurdo reintroducir especies extintas en las zonas donde habitaban sin antes solucionar qué los hizo desaparecer. Y por lo que he leído México está a años luz de conseguirlo. Por lo que no tardaremos en ver titulares como que la introducción de esos peces ha fracasado. Ojalá me equivoque.