Por Robyn Kriel, CNN
10 octubre, 2015
Conservacionistas sudafricanos arman una pila con cientos de colmillos de elefantes, para incinerarlos durante la conmemoración del 50 aniversario de un parque nacional en Chad, en febrero de 2014. (Crédito: Marco Longari/AFP/Getty Images).
(CNN) – Una mujer china apodada «La Reina del Marfil» fue detenida en Tanzania y acusada de contrabando de al menos 706 colmillos de elefante, que en el mercado negro alcanzarían un valor de cerca de 2,5 millones de dólares.
Se cree que Yang Feng Glan, de 66 años de edad, es la traficante de marfil más notoria arrestada en África oriental en la última década.
Ella manejó una sofisticada cadena de suministro entre África oriental y China durante aproximadamente 10 años, dicen las autoridades de Tanzania. Muchos de sus proveedores también fueron arrestados.
«A través de África, siguen arrestando a los peces pequeños por aquí y por allá», dijo Andrea Costa, portavoz de la Liga de Acción por los Elefantes, un grupo sin fines de lucro que lucha contra el crimen contra la vida silvestre. «Finalmente han atrapado un pez grande».
Se cree que Glan llegó a Tanzania como traductora swahili-chino en 1975, cuando China comenzó a construir un ferrocarril en la nación de África oriental, según la Liga de Acción por los Elefantes. Las autoridades competentes de Tanzania dicen que ella comenzó a traficar marfil desde 2006.
La describen como «extremadamente rica y con muchísimas conexiones» en China y en Tanzania, pues Glan era propietaria de negocios, entre ellos un gran restaurante en Dar es-Salam, la ciudad más grande de Tanzania, e incluso se desempeñaba como la secretaria general del Tanzania-China Africa Business Council (Consejo de Comercio de Tanzania China África).
Una fuente cercana a la investigación le dijo a CNN que Glan estaba bajo vigilancia cuando, el 28 de septiembre, un escuadrón de la policía la detuvo en Dar-es Salam. Después de una breve persecución en auto, fue detenida. Glan fue presentada ante el Tribunal Supremo de Tanzania y se le negó la libertad bajo fianza.
Esto representa un éxito importante para Tanzania, país al que algunos se refieren como la zona cero de la caza furtiva de elefantes en África. La nación de África Oriental ha perdido casi dos tercios de sus elefantes en la última década, dijo la Agencia de Investigación Ambiental, una organización no gubernamental con sede en el Reino Unido, en un informe el año pasado.
La detención se llevó a cabo a través de una nueva unidad especializada de tráfico de vida silvestre, parte de una fuerza de trabajo más amplia sobre crímenes graves conocida como Tanzanian National and Transnational Serious Crimes Investigation Unit (Unidad de investigación de delitos graves nacionales y transnacionales de Tanzania).
Las fuentes dicen que la unidad ha arrestado al menos a un traficante de vida silvestre por día desde su creación.
El portavoz del gobierno, Assah Mwambene, dijo que las autoridades, a través de la unidad de élite, ha «intensificado la guerra contra la caza furtiva de Tanzania».
Muchos dicen que el problema tiene que ver con la demanda, y China siempre ha sido identificada como la fuente del problema puesto que es el mayor importador de marfil en el mundo.
«Las especies de elefantes están en las manos del presidente de China», dijo el portavoz de la Liga de Acción por los Elefantes. «Una vez que el presidente decida cerrar el mercado legal de marfil y elefantes en China, la caza furtiva de elefantes terminará».
Recientemente, el gobierno chino hizo progresos para reducir el comercio de marfil en el país.
En septiembre, el presidente de China, Xi Jinping, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hicieron historia al anunciar que los dos países protegerían a los elefantes de la crisis de la caza furtiva mediante prohibiciones casi completas sobre las importaciones y exportaciones de marfil, y prometieron «medidas significativas y oportunas para detener el comercio interno de marfil».
13/02/2022
1 Comment
Rubén Torres
3 años agoSi en vez de incinerar esos colmillos (acto que no va a devolver la vida a esos animales) se hubiesen puesto a la venta, con esos 2,5 millones de dólares se podría empezar a poner en práctica lo que llevo proponiendo hace muchos años: hacer varias granjas de elefantes para comercializar su carne y sus colmillos cuando alcancen un buen tamaño. Por otra parte, se podría contribuir económicamente en la investigación de “resucitar” a los mamuts, pue esos gigantes sí tenían buenas defensas, que por otra parte, alcanzaría mucho más valor su marfil.
Por otra parte, a esa tal Yang Feng Glan si dependiera de mi, o sea, si fuese el juez que tuviese que decidir su condena por esos 10 años cometiendo esos delitos, le sentenciaría a entregar todos sus bienes, pero no solo lo de ella, sino a todos los de sus familiares y amigos. Además, le obligaría a trabajar 15 años cuidando elefantes criados en cautividad, y si no los trata bien, se le iría aumentando los años de condena.
Con todo lo recaudado, habría más que suficiente para crear las granjas y costear el mantenimiento. Por otro lado, se podría conmutar las penas de prisión por trabajar en las granjas a aquellos presos que así lo deseen, por lo tanto, la mano de obra para atender las granjas saldría muy barata, y de paso, se descongestionaría mucho las cárceles.
Respecto a la propuesta de prohibir la venta legal de marfil, es una irresponsabilidad ¿Cuántos años llevan los gobiernos luchando contra el narcotráfico? Pues lo único que se ha conseguido con perseguir ese negocio (que no hace daño a nadie, pues quien se droga lo hace de forma voluntaria) es llenar las prisiones de gente que solo intenta ganarse la vida y que el negocio sea muy rentable. (Ver los artículos sobre las drogas). Pues con los colmillos pasará lo mismo, que al estar prohibido, se disparará los precios de venta.