Antes de llegar al plato, para hacer este bistec se han consumido 5000 L de agua
¡Parece imposible pero es cierto!
Según La OMS (Organización Mundial de la Salud) cada kilo de carne de ternera que consumimos en los países desarrollados necesita 15.000 L de agua antes de llegar al plato. Para calcular este consumo de agua se tienen en cuenta la parte proporcional del agua que bebe la ternera durante su vida, la cantidad de agua que necesita el campo de donde se alimenta el ganado y el agua necesaria en la granja y el matadero.
El consumo de agua de este bistec de 300 gramos es equivalente a:
- 1250 descargas del WC de bajo consumo.
- El consumo de agua en 38 hogares por habitante y día en un país desarrollado.
- Poner en marcha 83 lavadoras de 5 kilos de ropa.
Mientras nosotros comemos este bistec tan apetitoso, según la Unesco, más de 700 millones de personas no tienen acceso al agua dulce y potable que les permitiría llevar una vida saludable. Además, se estima que alrededor de 2000 millones de personas no tienen acceso a servicios de saneamiento del agua, siendo las niñas y mujeres las más afectadas por este problema medioambiental.
Debido a que el agua dulce en nuestro planeta se distribuye de forma muy desigual, un tercio de la población mundial vive en situación de estrés hídrico, es decir, con insuficiente agua para su consumo. Desgraciadamente, la mayoría de estas regiones del mundo se encuentran en países en vías de desarrollo, con lo cual a la falta de agua hay que añadir la falta de servicios de saneamiento que permitan consumir agua potable y gestionar correctamente las aguas residuales del hogar, la industria o la ganadería y agricultura.
Es precisamente por este motivo por lo que el agua ocupa un lugar central en la nueva Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Tiene un papel destacado el garantizar la disponibilidad de agua potable y su gestión sostenible para todos.
La mayoría de nosotros abrimos el grifo del agua y dejamos que corra sin pensar como ha llegado a nuestro hogar, sin embargo, alrededor de 2000 millones de personas o bien no tienen grifo, o bien obtienen escasa agua de él y con unas condiciones que no permiten su consumo. Mientras en los países desarrollados consumimos una media de 200-300 L por habitante y día en los países en vías de desarrollo, como en numerosos países africanos, su población debe contentarse con un consumo medio entre 10-20 L por habitante y día.
¿Tiene este problema medioambiental solución?
Nosotros hemos aportado nuestro pequeño grano de arena desarrollando un programa educativo escolar de concienciación medioambiental. Si quieres, puedes colaborar con la difusión de nuestras actividades educativas enlazando nuestra web o bien, si eres docente, utilizando nuestro material en tus clases.
https://ambientech.org/antes-de-llegar-este-bistec-al-plato-se-han-consumido-5000-l-de-agua
4/10/2020
1 Comment
Rubén Torres
3 años agoPara hacer este bistec se han consumido 5000 L de agua.
R. El autor de este artículo no sabe distinguir un bistec de una chuleta (foto del encabezado)
Este artículo recrimina que en los países desarrollados se consume mucha agua, mientras en otros apenas tienen para asearse o calmar la sed.
Bueno, puestos a recriminar, puedo preguntar ¿por qué leches las parejas con pocos recursos tienen hijos? Hacer eso es de gente irresponsables, de idiotas y de ser inconscientes. Pues al final lo pagan los niños. Por eso yo no me siento culpable de que esa gente esté en esa situación. Hasta los animales irracionales son más sensatos.
La ganadería no es el problema, pues necesitamos comer carne y no es plan de liarnos a tiros por el bosque contra los pocos animales que nos queda. En menos de una semana no quedaría ni un animal más grande que una rata. El error está en la elección de criar ganado vacuno. Si cambiásemos de especies como: emús, canguros, cocodrilos, antílopes o jirafas, las cifras del consumo de agua serían muy distintas.
El consumo de forraje también es sustancial, por ejemplo; las jirafas necesitan 17 Kg/día, las vacas necesitan 70 Kg/día.
Tampoco se menciona el gran perjuicio que ocasiona la producción de carne de res, pues una parte importante del pienso con lo que se las alimenta lleva soja. Cultivar esta legumbre es uno de los principales impulsores de la deforestación tropical en América del Sur, incluida la Amazonia brasileña y el Cerrado.
El 2% de las propiedades en el Amazonas y el Cerrado son responsables del 62% de toda la deforestación potencialmente ilegal, y que aproximadamente el 20% de las exportaciones de soja y al menos el 17% de las exportaciones de carne de vacuno de ambos biomas a la UE pueden estar contaminadas con deforestación ilegal.