Sábado 20 de agosto de 2022
Investigadores de la Universidad Politécnica de Cartagena están formulando y testando hormigón ecológico obtenido de escorias industriales y desechos áridos del sector de la construcción, que al activarlos con residuos de la industria textil, como la sosa cáustica, forman un conglomerado de reciclaje que, prescindiendo del cemento, logra similar resistencia y durabilidad que el hormigón armado tradicional. Este hormigón ecológico minimiza la huella de carbono del material de construcción más utilizado y da una segunda vida útil a materiales destinados a los vertederos, según han informado fuentes de la institución docente.
El investigados responsable, Carlos Parra, ha explicado que «en las pruebas mecánicos de compresión, tracción y adherencia, así como en los ensayos de durabilidad, para conocer su respuesta a los procesos de degradación, estamos logrando resultados óptimos», de hecho han testado un millar de probetas. Además, este hormigón de economía circular tiene la capacidad de encapsular materiales contaminantes, evitando los efectos nocivos de su abandono en el medio ambiente. Los materiales que están reciclando proceden de escorias de soldadura de los astilleros, de centrales térmicas, de obras de construcción y del sector textil.
[Esta noticia fue publicada originalmente en Europa Press. Lee el original aquí]
Foto: Universidad Politécnica de Cartagena
22/08/2022