Sin rebaños no hay futuro
Enrique Fantova, director del Equipo Veterinario de Oviaragón (Pastores Grupo Cooperativo)
03/06/2022
Cada rebaño de ovejas que se pierde en nuestro territorio (y llevamos décadas de experiencia continuada en ello) hay un entorno que sufre. Sufre despoblación y sufre abandono. En poco tiempo un territorio vivo pasa a ser invisible a la actividad humana y pierde toda la relevancia económica, social y medioambiental que tenía con la presencia del rebaño.
Es el rebaño, con su variedad y con sus razas, el vehículo que une a todos los ecosistemas que recorre (vegas de río, bosques, monterizas, puertos, campos de cultivo, barbechos…), posibilitando múltiples interacciones entre sus miembros (humanos, plantas y animales) y su entorno (agua, aire, suelo…).
Y dentro del rebaño es el pastor o la pastora, el conductor de este río de diversidad biológica que va a contribuir a mantener vivo y en activo todo su entorno natural.
Si no hay rebaños no hay futuro. La sociedad debe quitarse la careta de una vez, dejar de hablar de lo obvio y llevar al terreno hechos concretos que faciliten que nuestra ganadería extensiva sea el estímulo principal para la continuidad de nuestros pueblos.
Esto se consigue con una sociedad concienciada que ponga en valor y centre los recursos en las actividades que realmente contribuyen a mantener el tejido social en nuestro medio rural. De lo contrario, la despoblación seguirá campando a sus anchas y nuestro medio natural pasará a ser un medio de divertimento ocasional para el mundo urbano como ya lo son algunas zonas en muchos momentos.
Rebeca Peguero, accésit del Premio a la Biodiversidad Oviaragón 2022.
La ganadería ovina y caprina en Aragón ha sido una actividad fundamental para mantener y desarrollar la economía en nuestro medio rural que con la evolución de las ciudades y el cambio de valores que ha supuesto ha ido desembocando poco a poco en el medio urbano, dejando nuestros pueblos abandonados.
Sin embargo, los poco más de 3.000 rebaños que continúan en nuestra comunidad siguen siendo una auténtica fuente de riqueza y empleo, convirtiéndose en muchas comarcas en la principal y en muchos casos única alternativa que tienen nuestros hijos para poder quedarse a vivir en nuestros pueblos.
La sociedad y el propio sector tenemos que buscar las alianzas necesarias que nos permitan desarrollar esta actividad con la rentabilidad suficiente para que los rebaños sigan ejerciendo su papel de producir alimentos únicos y extraordinarios a la vez que mantienen nuestro medio natural como un jardín rico y diverso.
https://www.interempresas.net/Ganadero/Articulos/391019-Sin-rebanos-no-hay-futuro.html
22/08/2022
1 Comment
Rubén Torres
2 años agoUna vez más hay gente que recurre a los titulares sensacionalistas para atraer la atención de los ignorantes que se suelen creer todo lo que les cuentan. En este caso se trata de otro cuento más.
El autor/a de este artículo absurdo podrá engañar a los neófitos contando cosas que carecen de relevancia, como decir que gracias a los ganaderos se evita el abandono de los pueblos.
Precisamente vivir en los pueblos conlleva una pérdida sustancial de biodiversidad, pues evita que la mayoría de los depredadores prosperen y los pocos que se acercan entran en conflicto con los ganaderos. Precisamente por culpa de los ganaderos se llegó a extinguir el lobo de la península ibérica y casi acaban con nuestro lince ibérico y con todas las águilas reales e imperiales. De hecho, han pasado más de 60 años y sus poblaciones no se han recuperado. En cuanto al lobo, tuvimos que importar unos cuantos de Italia.
En cuanto a que sin los ganaderos no hay futuro, supongo que se refiere a puestos de trabajo. Ahí a metido la pata hasta el fondo, pues resulta que hay trabajo para aburrir, lo que ocurre es que mientras existan unos legisladores descerebrados que nos imponen leyes absurdas, no hay forma de levantar cabeza y el desempleo seguirá en aumento.
Retomando el tema de los pueblos, cualquiera que haya visitado uno se dará cuenta que la gente que vive en ellos ha destrozado la naturaleza de una forma bestial, una gran parte del territorio de cada pueblo arrasó con los bosques primigenios para convertirlos en zonas de cultivo. Por eso es vital que todos los pueblos sean abandonados y que la Naturaleza recupere lo que los humanos le robaron. Es la única forma que regresen los bisontes europeos, los osos y demás animales. Por supuesto no hay que olvidar que el ganado caprino y ovino son los que impiden que los nuevos brotes de encinas, robles etc. prosperen, así pues, sin esa lacra millones de árboles volverían a recuperar su espacio.