19 Agosto 2019
Qué levante la mano quien no se sienta incómoda con las compresas, que se mueven y terminan hechas un gurruño. Pero también somos muchas las que sufrimos sequedad con los tampones y aún no conseguimos ponernos la copa menstrual a la primera. Por eso quise busca alternativas y estas braguitas menstruales se han convertido, desde hace años, en mi solución.
La primera vez que oí hablar de estas braguitas menstruales tenía muchas dudas, especialmente con el tema del olor y la humedad. Pero con las compresas irritándome la zona y los tampones dándome terribles problemas de sequedad interna, estaba desesperada y me lancé a probarlas sin demasiadas expectativas.
¿Qué tienen de especial las braguitas de Cocoro Intim?
Cocoro Intim es una firma de braguitas españolas de muchos tipos, desde tangas hasta diseños de tiro alto para las que necesitan sentirse más cubiertas y protegidas en esos días del mes. Pero todas ellas tienen algo en común y está en la zona de la braguita en contacto con la vagina.
Ahí es donde la firma apuesta por una triple capa: la primera de algodón para evitar alergias y aparición de hongos con la humedad. La segunda, de poliéster absorbente, antibacteriano y transpirable para absorber el flujo, está escondida entre el algodón. Y la tercera capa es de tejidos bonitos para dar un toque de diseño a la ropa interior.
La teoría está muy bien, pero en la práctica me han cambiado la vida
Si de algo puedo hablar con experiencia en cuanto a métodos de contención en días de regla, es de estas braguitas. Llevo ya dos años utilizándolas y se las recomiendo a cualquiera que me pregunte. La respuesta es siempre la misma: ¿de verdad funcionan? ¿No son incómodas con la humedad? ¿Cómo las lavas?
Sí, si que funcionan. De hecho, no recuerdo la última vez que me encontré el manchurrón de sangre en el pantalón, cosa que los tampones ocurre día sí y día también. El primer día tengo más cantidad de flujo y las acompaño con un tampón para evitar desastres. Pero después me basta con cambiarme la braguita un par de veces al día y olvidarme del tema.
Cuando digo “olvidarte”, es de verdad. Porque el refuerzo del triple forro funciona a la perfección, sin olores fuertes ni incomodidad de humedad. Sí es verdad que esa zona del puente se siente más gruesa y reforzada con la tela, pero es una sensación hasta reconfortante porque me hace sentir más protegida. Voy a adelantarme a una pregunta que muchos me han hecho: no, no se hinchan como un pañal cuando han absorbido demasiada menstruación.
En cuanto a las manchas, pues obviamente quedan restos de sangre. En esto no se ha inventado todavía una solución. Pero al ser diseños negros tú no percibes el desastre ni los restos que puedan quedar marcados en rojo. Además, se pueden lavar como cualquier otra braguita y reutilizar una y otra vez, así que son hasta eco. Eso sí, evitando suavizantes y lavando a 30º para no estropear su efecto.
Si bien es cierto que su precio es algo elevado, lo cierto es que te solucionan tanto que yo repetí una y otra vez, hasta tener unas ocho que roto en días de regla. Pero si te estás planteando probarlas, te recomiendo que empieces por una y veas si te sientes cómoda y si es suficiente para absorber todo tu flujo (hay propuestas para flujos escasos, moderados y abundantes). Yo, a estas alturas, no las cambiaba por nada.
Su triunfo les ha llevado a la expansión
Cuando yo comencé a utilizarlas, las encontré gracias al sabio Google. Pero muy pocas de mis amigas habían oído hablar de ellas y a día de hoy siguen siendo bastante desconocidas. Al menos que hayas echado mano del ordenador para buscar unas braguitas menstruales, en cuyo caso te saldrán bien arriba en el buscador.
Pasito a pasito, parece que la firma Cocoro Intim ha sabido especializarse cada vez más en este mercado femenino tan necesario. Porque después de dos años desde su creación, ahora se encuentran en ronda de financiación para impulsar la marca íntima, tanto en publicidad como en internacionalización. Yo, desde luego, considero que deberían estar hasta en la Luna, porque son lo mejor que ha pasado a mi vagina en estos días del mes.
Fotos | Unsplash, Cocoro Intim.
30/09/2021
1 Comment
Rubén Torres
3 años agoPepa empieza cometiendo errores desde el principio; en varias ocasiones se refiere a esa prenda como braguitas. Me pregunto que desde qué talla se pasa de braguitas a bragas. Porque en muchímas ocasiones en TV las llaman así. ¿Acaso les da vergüenza decir bragas que es su verdadero nombre? Con el culo pasa lo mismo, en muchísimas ocasiones se refieren a esa parte del cuerpo en diminutivo ¿por qué no dicen culo?
Otro error que comete esta ignorante chica es cuando dice: la zona de la braguita en contacto con la vagina. Hasta donde yo sé, ninguna braga toca la vagina, pues esa parte está ubicada dentro del cuerpo femenino, por lo que a no ser que se metan las bragas en la raja del coño como hacen con los tangas en el culo, no pueden tocar la vagina.
Pepa vuelve a errar cuando dice: han absorbido demasiada menstruación. Como si ese ciclo mensual pudiese absorberse. Debería referirse el flujo menstrual o la sangre menstrual. Pero no, la ignorancia de esta chica no cesa de aflorar.
Por enésima vez vuelve a errar cuando dice: En esto no se ha inventado todavía una solución. Hace mucho tiempo que se inventó el tejido a prueba de manchas. Aquí os dejo un enlace que habla de este tipo de tejidos; https://www.elconfidencial.com/tecnologia/2014-08-18/materiales-hidrofobos-claves-para-que-tu-ropa-no-se-manche_176300/
Y más fallos, esta vez con el léxico. Para mí que esta chica se dormía en clase o pasaba de escuchar a los profes. Pues dice: unas ocho que roto en días de regla. Si hubiese prestado atención en clase sabría que roto es un adjetivo correspondiente al verbo romper, usado también como sustantivo (de forma equivalente a rotura). Pero intuyo que se refiere a los verbos rotar, cambiar o sustituir.
Como colofón, esta chica no podía despedirse sin decir una chorrada más; son lo mejor que ha pasado a mi vagina en estos días del mes. Una de dos, o prefiere llevar esas bragas antes que sentir una polla en su vagina, o es que nunca ha follado con la regla.