El aumento de serpientes en la región de Buton del Sur, en Indonesia, deja su primera víctima humana
Por
Álvaro Pérez
Serpientes Pitón. (Infobae España)
En un horroroso hallazgo, el cuerpo un agricultor de 63 años del subdistrito de Batauga, en Buton del Sur, Indonesia, identificado con las siglas LN fue encontrado dentro del estómago de una pitón de 8 metros de largo. El hombre había sido declarado como desaparecido el pasado viernes 11 de julio, y su cuerpo fue descubierto el sábado 12 de julio, tras una búsqueda realizada por sus familiares y vecinos. Este es el primer caso de ataque mortal por una serpiente en la región, según información publicada por el medio indonesio Antara.
LN había estado trabajando en su plantación, pero no regresó a casa esa tarde, lo que generó preocupación entre su familia y vecinos. Al día siguiente, tras no encontrarlo en la plantación, su familia decidió comenzar a buscarlo. Encontraron su moto estacionada en el arcén de la carretera, pero no había rastros de él. La búsqueda continuó, y fue entonces cuando los residentes encontraron una pitón de grandes dimensiones que parecía estar luchando y retorciéndose.
Residentes descubren la horrible verdad
Según informa Antara, cuando los vecinos comenzaron a sospechar que la serpiente había ingerido algo grande, decidieron matarla. Al abrir el estómago del reptil, descubrieron que el cuerpo de LN estaba dentro. La noticia fue confirmada por Laode Risawal, jefe de la división de emergencia y logística de la Agencia Regional de Gestión de Desastres (BPBD) de Buton del Sur, que explicó que este tipo de incidente es inédito en la región.
En una entrevista realizada por el medio Ouest France, Sertu Dirman, un suboficial supervisor de la aldea, señaló que los residentes inicialmente sospecharon del comportamiento extraño de la pitón. Posteriormente, al abrir el vientre del reptil, confirmaron que era el cuerpo del agricultor desaparecido.
La cabeza de una pitón reticulada (REUTERS/Phil Noble)
La temporada de lluvias aumenta la presencia de serpientes
Según Ouest France, las serpientes han aumentado en número desde la llegada de la temporada de lluvias, lo que ha generado más encuentros con humanos. En la mayoría de los casos, estas serpientes suelen atacar al ganado, pero este incidente es un ejemplo de que también pueden atacar a personas.
Las pitones reticuladas, que pueden alcanzar longitudes de hasta 6 metros o más, son comunes en Indonesia y Filipinas, y suelen alimentarse de animales pequeños.
Un caso aislado, pero no imposible
Aunque los ataques mortales por serpientes son excepcionales, este caso no es único en Indonesia. En 2017, un agricultor de 25 años fue encontrado dentro del estómago de una pitón de 7 metros en el pueblo de Salubiro. Las autoridades locales han insistido en que los ataques mortales a humanos por serpientes son muy poco frecuentes, pero no imposibles. La presencia de estas serpientes en las áreas rurales, en especial durante la temporada de lluvias, sigue siendo una preocupación para las comunidades locales.
Tras el descubrimiento del cuerpo, los residentes y las autoridades locales llevaron el cuerpo de LN a su hogar para que la familia pudiera llevar a cabo su funeral. Mientras tanto, las autoridades han prometido tomar medidas para evitar futuros encuentros con serpientes.
18/07/2025
1 Comment
Rubén Torres
13 horas agoHe aquí un caso de superdesceebrados más.
En primer lugar, tenemos que esos patanes no han aprendido a dejar de cultivar en el exterior.
Después nos encontramos con que no se sabe nada sobre cómo pudo atacar la pitón a una persona, por lo que dudo que se averigüe nunca.
También podemos ver cómo la gente se dedica a matar grandes serpientes por capricho, pues supongamos que ese reptil no tuviese a ningún humano en su estómago, quién le devolvería a la vida, y por qué no se capturó y le hicieron una radiografía.
Por otra parte, matando al animal nadie le va a devolver la vida a ese desgraciado que se dejó cazar.
Y, por último, lo que más me preocupa son esas medidas que dicen que van a tomar las autoridades. Mucho me temo que esos descerebrados van a cometer un gran desastre medioambiental.