04/04/2024
Los sistemas alimentarios están en el centro de los actuales cambios a nivel ambiental y social. Se demuestra una vez más la interdependencia entre la sociedad y la naturaleza, las debilidades de una se reflejan en la otra y afectan al suministro de alimentos. Tenemos que afrontar soluciones hoy a nuestra alimentación de mañana. Debemos trabajar en asegurar un futuro laboral justo a los productores y un sector agrícola productivo sostenible y rentable. En el corazón del cambio está luchar contra la pobreza y la desigualdad.
Nuestro trabajo como Certificación de Comercio Justo de las cadenas de aprovisionamiento de alimentos busca trabajar para conseguir una alimentación sostenible para las personas y el planeta. Vivimos un momento de cambio donde todos los actores intervinientes en las cadenas de aprovisionamiento buscamos reconstruir las relaciones comerciales para asegurar un futuro justo. No es posible afrontar el futuro si no trabajamos todos juntos promoviendo alianzas que permitan responder a los riesgos globales.
Las nuevas legislaciones, como la Directiva de Diligencia Debida de Sostenibilidad Corporativa, el Reglamento de Deforestación, el empoderamiento de los consumidores para la transición ecológica o la Ley Consumo, afectan de manera directa e indirecta a toda la sociedad: desde la producción, la transformación o el consumo.
Este nuevo marco de trabajo nos exige cambios en nuestra forma de trabajar, desde adaptar nuestros Estándares a fortalecer la capacitación de sus redes productoras y empleados.
«No es posible afrontar el futuro si no trabajamos todos juntos promoviendo alianzas que permitan responder a los riesgos globales»
Fairtrade, como certificación de comercio justo que trabaja con toda la cadena de aprovisionamiento, busca concienciar e implicar a todos de una manera que beneficie a las personas y al planeta. Trabajamos mano con mano con los distintos agentes en un proyecto común de justicia social que preserve nuestros recursos y asegure la sostenibilidad de las generaciones futuras. Solo trabajando de manera conjunta podremos garantizar una economía global equitativa. Ya no existe el Sur Global o el Norte Global, todos formamos parte de una misma sociedad con unas mismas necesidades de hacer frente a la crisis climática, preservar la biodiversidad y conseguir el bienestar de las personas.
Desde la Certificación Fairtrade apostamos por relaciones justas en la cadena agroalimentaria, el fomento de una producción sostenible y la promoción del consumo responsable. Transformar los sistemas alimentarios es un deber de todos y para todos.
Desde Fairtrade creemos que el cambio de los sistemas alimentarios tiene el potencial de crear prosperidad, empezando por garantizar el empleo de calidad y continuando por la aplicación de buenas prácticas comerciales sostenibles. Garantizar un empleo de calidad debe asegurar salarios justos y dignos. Salarios e ingresos que permitan a los productores ganar lo que necesitan para vivir. El centro del movimiento de Comercio Justo está en conseguir una nueva forma de producir, fabricar y consumir.
Juntos debemos poner en marcha prácticas alimentarias sostenibles con el objetivo de mejorar los beneficios sociales y ambientales.
Los sistemas alimentarios ofrecen la oportunidad de promover relaciones más justas que ayuden a erradicar la causa fundamental de la desigualdad: la pobreza.
En el centro de los sistemas alimentarios no se encuentran las materias primas o productos, sino las personas. Es fundamental que promovamos sistemas alimentarios justos, saludables, sostenibles y resilientes. Conseguir modelos de alimentación sostenible es casi un derecho.
Autor: Álvaro Goicoechea, director de Fairtrade Ibérica
https://www.bioecoactual.com/2024/04/04/tenemos-derecho-a-un-modelo-de-alimentacion-sostenible/
27/04/2024
1 Comment
Rubén Torres
5 meses agoHe podido comprobar en demasiadas ocasiones cómo muchos botarates confunden el tocino con la velocidad. Por cierto, es normal viniendo de un botarate que diga gilipolleces, de ahí lo de botarate.
Este artículo empieza mal desde el primer párrafo; pues empieza hablando de los sistemas de alimentación y seguidamente lo mezcla con otros temas que requieren artículos propios dado lo complejo que es explicar cada uno de ellos por separado, pero no, el zoquete de Álvaro no ha tenido ningún reparo en mezclarlos todos. No entiendo cómo un zoquete como éste pueda haber llegado a director.
Voy a desglosar la gran cantidad de disparates que ha escrito este botarate; “Debemos trabajar en asegurar un futuro laboral justo a los productores” Si tenemos en cuenta que la palabra justo es subjetiva poco se puede avanzar, pues quién decide qué es justo, cuánto cuesta el trabajo, cuánto se le debe pagar al agricultor. Lo dicho, es subjetivo. Por lo tanto es de idiotas escribir sobre cosas subjetivas dado que no van a ninguna parte.
El garrulo dice “Tenemos que afrontar soluciones hoy a nuestra alimentación de mañana”. Ja, ja, ¡qué gracia me hacen esas palabras! Para empezar, ¿Quiénes son esos tenemos, todo el mundo, los gobernantes, los científicos, los investigadores, los agricultores, a quién leches se refiere? En el caso que se refiera a los políticos, ja, ja ¿Desde cuándo esa panda de descerebrados han sabido solucionar algo? Por otra parte, basta con aplicar las nuevas leyes para que se solucionen todos los problemas socioeconómicos y medioambientales.
Más adelante dice: “un sector agrícola productivo sostenible” A este garrulo le cae demasiado grande hablar sobre sostenibilidad, de hecho, nunca he visto ninguna publicación que explique su significado de forma coherente e imparcial. Lo que me lleva a determinar su inexistencia. Y si una cosa no existe ¿para qué hablar de ello? Es de idiotas.
Y como ya he dicho al principio, no debería mezclar los temas; como la pobreza y la desigualdad. Que no tienen nada que ver con la alimentación.
El berzotas insiste “para asegurar un futuro justo”. Ya he explicado que justo es una palabra subjetiva. Por lo que no tiene sentido utilizarla si hablamos de alimentación. Pues si profundizamos llegaremos a una de las preguntas incómodas ¿quién tiene derecho a vivir? Pues los que no lo tengan no deberíamos producir alimentos para ellos, que por cierto, en mi opinión son varios miles de millones de personas que sobran en este planeta.
Como no podía esperarse una brillante idea de un berzotas, éste garrulo dice: “Solo trabajando de manera conjunta podremos garantizar una economía global equitativa” Es imposible lograrlo” es como pedirle peras al olmo. O sea, otra estupidez.
No se vayan, que el garrulo tiene más gilipolleces que decir “preservar la biodiversidad y conseguir el bienestar de las personas”. Dado que en la mayoría de países existen políticos (todos ellos unos descerebrados) o malos dictadores eso hablar de utopías.
Con este garrulo es un no parar “Garantizar un empleo de calidad debe asegurar salarios justos y dignos”. No hay forma de que se entere que todo lo relacionado con la justicia es arbitrario.
Y más de lo mismo “prácticas alimentarias sostenibles”. Ya he explicado que no existe la sostenibilidad.
Discrepo de esta afirmación “la causa fundamental de la desigualdad: la pobreza”. En mi opinión es la presencia de los políticos descerebrados.
Nota, siempre he defendido que el respeto hay que ganárselo, por lo que siempre insultaré a todos los que se dedican a desinformar, pues son los culpables de que la humanidad en vez de evolucionar vaya hacia atrás y no pueda prosperar causando un aumento de pobreza, deforestación, extinción de especies, el aumento de gente encarcelada, aumento de la basura, contaminación, etc.