Carta de Greenpeace
20/04/2023
Hola, Rubén
La Junta de Andalucía acaba de firmar la que podría ser la sentencia de muerte de Doñana. Probablemente el Parque Nacional más valioso para la naturaleza de nuestro país, hogar de especies tan emblemáticas como el lince ibérico o el águila imperial, y un humedal único en Europa, puede desaparecer tal y como lo conocemos.
Tras la reciente votación del Parlamento de Andalucía, con el apoyo del PP y VOX, se pone en marcha un proceso que prevé indultar cientos de hectáreas de regadíos ilegales que llevan décadas robando y saqueando un bien común cada vez más escaso y precioso: el agua.
Todo un despropósito para saciar la sed de negocio de un puñado de empresarios de la agroindustria de los frutos rojos, que ataca flagrantemente a los regantes legales que sí han cumplido con sus cuotas de agua asignada.
En un contexto de sequía galopante, con previsiones no muy buenas para los próximos meses y en medio de una crisis climática, esta norma amenaza directamente la supervivencia de Doñana. Los mismos que coquetean con el negacionismo climático están prometiendo un agua que, digámoslo ya con claridad, no va a llegar: tenemos poca agua, cada vez más escasa, muy contaminada y, como acabamos de comprobar, mal gestionada. Prometer más y más regadíos, no solo en Andalucía, es vender humo a los agricultores: papel mojado en un país que se desertifica.
El país más seco de Europa exportando agua en cajas de fruta y verdura. Es intolerable y un insulto contra la ciencia, que no puede ser más clara y contundente a la hora de decir que el acuífero que mantiene con vida a Doñana se muere, y contra las leyes de la Unión Europea: desde Bruselas ya han advertido que emprenderán las medidas necesarias para multar a España si este desastre se consuma. Una vez más, los autores de este atropello legislativo verán desde sus escaños y despachos cómo el resto de contribuyentes pagamos sus desaguisados millonarios.
Hemos visto degradarse muchos espacios naturales de altísimo valor en todo el planeta, pero nunca imaginamos que serían los Gobiernos encargados de protegerlos quienes activarían el mecanismo de destrucción en un espacio que creíamos amparado por las más exigentes figuras de protección. Si la Junta de Andalucía no respeta Doñana, la ‘joya de la corona’ de la naturaleza en España, ¿qué cabe esperar para el resto de valores naturales del sur de la península?
No será el último mazazo que recibamos, pero tampoco es el primero. Y como en tantas ocasiones, no dejaremos que el miedo o la rabia nos paralicen. Desde Greenpeace seguiremos trabajando sin descanso para proteger la biodiversidad y revertir este desastre. Nos va la vida en ello. ¿Puedo contar contigo?
Gracias por tu solidaridad y tu compromiso
Eva Saldaña
Directora Ejecutiva de Greenpeace España
P.D.: En Greenpeace no aceptamos dinero de gobiernos ni empresas para poder denunciar a todas aquellas personas o instituciones que amenazan el planeta. Todo lo que hacemos es gracias a la contribución de personas como tú. Por favor, hazte socio/a hoy y ayúdanos a hacer posible nuestro trabajo >>
20/04/2023
1 Comment
Rubén Torres
2 años agoHay que ser muy ingenua para creer que nuestro gobierno es capaz de solucionar nada. Se nota que nunca te ha dado por leer todos los artículos que están publicados desde hace varios años en http://www.tevasaenterar.es Políticos nefastos y El agua en las secciones de Medioambiente y Sociedad.
Por otra parte ninguna asociación ecologista es capaz de hacer algo eficaz para solucionar cualquier problema medioambiental, solo sabéis quejarse, que solo sirve para perder el tiempo y el dinero de los suscriptores. El Parque Nacional Doñana como Las Tablas de Daimel y todos los demás hace muchos años que ya fueron condenados a muerte por elegir a los políticos más estúpidos en vez de pedir que se aplique lo que se propone en dicho blog que te he mencionado. Así, sí es posible solucionar las cosas. Por eso no me da la gana de tirar mi dinero con vosotros.