Por Heather Gies en 10 enero 2020

El 25 de junio, los legisladores de las Islas Vírgenes de los Estados Unidos votaron prohibir ingredientes químicos habituales de las cremas solares que puedan dañar a los corales.

Con esta prohibición, las Islas Vírgenes se unen a otras jurisdicciones de todo el mundo en una acción pionera contra las cremas solares perjudiciales. Será la primera prohibición de este tipo en los Estados Unidos.

La gente que vaya a la playa en las Islas Vírgenes de los Estados Unidos se protegerá con cremas solares más ecológicas el año que viene. Esta medida obedece a la decisión tomada por los legisladores que votaron a favor de prohibir los ingredientes químicos que suelen estar presentes en los protectores solares y que pueden dañar a los corales. Con la prohibición, las Islas Vírgenes se unen a otras jurisdicciones de todo el mundo en una acción pionera contra las cremas perjudiciales. Sin embargo, esta ley afecta a un ingrediente más que la mayoría de leyes parecidas y será la primera en entrar en vigor en Estados Unidos y una de las primeras en el mundo.

La nueva ley, aprobada de forma unánime en la asamblea legislativa de las Islas Vírgenes el 25 de junio afecta a la oxibenzona, el octocrileno y el octinoxato, tres agentes químicos que bloquean los rayos ultravioletas y se encuentran en la mayoría de productos de protección solar comerciales en Estados Unidos. Los estudios han mostrado que dañan a los corales y otros ecosistemas marinos. Las importaciones de cremas que contienen esos productos químicos fueron declaradas ilegales el 30 de septiembre de 2019, mientras que la prohibición de su distribución, venta, posesión y uso entrará en vigor el 30 de marzo de 2020.

Craig Downs, director ejecutivo de la organización sin ánimo de lucro Haereticus Environmental Laboratory, de Virginia, dijo que prohibir los ingredientes perjudiciales de los protectores solares es algo fácil de hacer para abordar las amenazas para los frágiles ecosistemas coralinos. “La degradación de la calidad del agua”, a la que contribuye la contaminación de las cremas solares, representa “la mayor némesis para los arrecifes de coral”, declaró.

En un artículo de 2016, Downs y sus compañeros investigadores descubrieron que uno de los tres productos prohibidos, la oxibenzona, “plantea un riesgo para la conservación de los arrecifes de coral y amenaza a la resistencia de los arrecifes de coral al cambio climático” al deformar los jóvenes corales y dañar el ADN del coral. El estudio es parte de un conjunto cada vez mayor de investigaciones que están impulsando acciones legislativas contra la contaminación causada por las cremas de protección solar.

La playa en Trunk Bay en el Parque Nacional de las Islas Vírgenes, donde los investigadores han detectado contaminación a causa de las cremas solares. Imagen de Kaitlin Kovacs, USGS en Wikimedia Commons

Los investigadores calculan que las aguas de zonas con arrecifes absorben entre 6.000 y 14. 000 toneladas de crema solar cada año en todo el mundo. Aunque los protectores solares sean un contaminante tangible, el cambio climático y la acidificación de los océanos plantean una amenaza incluso mayor para los arrecifes.

“Prohibir la venta de estas cremas solares no va a restaurar la salud de los arrecifes de coral. Es solo una herramienta más”, dijo en un correo electrónico Tali Vardi, bióloga experta en corales y coordinadora del Coral Restoration Consortium.

“El paso esencial es una acción fuerte del gobierno contra el cambio climático, ya que los corales viven en el umbral de un rango térmico muy estrecho”, dijo. “Sin embargo, esto [no utilizar cremas perjudiciales] es algo que las personas pueden hacer”.

Además de ser lugares frecuentados por los buceadores, los arrecifes de coral sanos son áreas que actúan de barrera esencial contra las tormentas y la erosión costera. También contribuyen a la economía significativamente. En los Estados Unidos, los arrecifes aportan al menos $3.4 mil millones anualmente entre turismo, pesca y protección costera, en esa suma se incluyen los 1.7 mil millones de Hawái, mil millones de Puerto Rico y 187 millones de las Islas Vírgenes. En todo el mundo, al menos 500 millones de personas dependen de los arrecifes de coral para obtener comida, protección costera e ingresos.

En el Caribe, el coral ha sufrido un declive de por lo menos un 50 % en los últimos cincuenta años y podría desaparecer por completo en las dos próximas décadas si no se trabaja urgentemente en su conservación, según la Red Mundial de Monitoreo de los Arrecifes de Coral. Un factor clave es el grave episodio mundial de blanqueamiento de coral, con el que los arrecifes pierden su color y sus defensas. Entre 2014 y 2017, arrecifes de coral que se extendían cientos de kilómetros sufrieron lo que un artículo en la revista Bulletin of the American Meteorological Society describió como el episodio “más largo, más extendido y, casi con total seguridad, más destructivo” de blanqueamiento de coral jamás registrado. Hay varios factores de estrés que pueden causar blanqueamiento, pero cuando pasa de forma masiva como en este caso, la culpa es del aumento de las temperaturas, y este fenómeno ha aumentado de frecuencia e intensidad con el cambio climático.

Un buceador sobre coral blanqueado en Heron Island, Australia, en 2016. Cuando aumentan las temperaturas del océano, los corales estresados expulsan las algas, lo que hace que se vuelvan blancos y sean más vulnerables al colapso si el estrés se prolonga. Imagen de The Ocean Agency / XL Catlin Seaview Survey / Richard Vevers a través de Flickr (CC BY 2.0).

Downs dijo que los ingredientes tóxicos de las cremas solares amenazan a los arrecifes  bajando la temperatura al nivel en el que el coral se blanqueará. Los compuestos químicos también dañan el ADN e interfieren con el desarrollo inicial, de manera que amenazan la viabilidad a largo plazo de los corales.

“La contaminación de las cremas solares es continua y se renueva cada día”, lo cual reduce la capacidad de los corales de recuperarse después de haber sido dañados por el blanqueamiento o un huracán “al evitar que ‘la siguiente generación’ de corales y peces se una a un arrecife de coral específico”, dijo Downs en un correo electrónico. “Eso causa este paisaje marino desolador, especialmente en zonas con mucho turismo”.

Además de los efectos sobre el coral, los investigadores han descubierto que los productos químicos de los protectores solares pueden disminuir la fertilidad de los peces, dificultar el crecimiento de las algas, causar deformidades en mejillones y erizos de mar jóvenes y acumularse en los tejidos de los delfines.

Los científicos se proponen hacer un seguimiento de los niveles de contaminación a medida que las prohibiciones entren en vigor, así como aumentar los esfuerzos de restauración si la contaminación a causa de las cremas solares desciende como se ha previsto, añadió Downs.

Un buceador en St. Croix, Islas Vírgenes de EE. UU. El turismo es la piedra angular de la economía de las Islas Vírgenes. Imagen de Summitandbeach a través de Wikimedia Commons (CC BY-SA 4.0).

La senadora de las Islas Vírgenes, Janelle K. Sarauw, una de las impulsoras de la ley, enfatizó la importancia de proteger las playas de las Islas Vírgenes como “zona de juego natural para nuestros hijos y los turistas”, además de la importancia de la pesca como una de las “formas de vida económicas” de las islas.

“Queremos fomentar una alternativa más sana y más segura con el uso de protector solar natural, pero también tenemos que ser agresivos para salvar nuestros arrecifes  con la prohibición de cremas solares perjudiciales”, dijo Sarauw en un correo electrónico. “Que las Islas Vírgenes estén más limpias, tanto en la salud de su gente como la de sus espacios, nos beneficia a todos”.

Una versión anterior de la nueva ley proponía su aplicación en 2021, pero la versión final aceleró los tiempos y ha convertido a las Islas Vírgenes de los Estados Unidos en la primera jurisdicción en aplicar una prohibición a los productos químicos de las cremas solares.

Hawái y Key West, Florida, han aprobado prohibiciones a la venta de cremas solares que contengan oxibenzona y octinoxato que deberían entrar en vigor en 2021. California ha discutido una posible prohibición, mientras que Florida retiró un proyecto de ley similar antes de que fuera votado, y los legisladores de Miami Beach votaron en contra de una prohibición propuesta a principios de este año.

La mayoría de cremas solares comerciales en el mercado estadounidense contienen ingredientes químicos que según los estudios son perjudiciales para los arrecifes de coral. La FDA también duda de la seguridad de la mayoría de ingredientes de productos con factor de protección solar. Imagen de Joe Shlabotnik en Flickr (CC BY-NC-SA 2.0).

Fuera de Estados Unidos, el país insular Palaos, en el Pacífico, ha prohibido los tres mismos componentes que las Islas Vírgenes, además de otros ingredientes como los parabenos que se utilizan en cremas hidratantes, champús y otros productos de higiene personal a partir del 1 de enero de 2020. En el Caribe, Aruba y Bonaire, un municipio que forma parte de los Países Bajos, tienen sus propias versiones de la ley que entrarán en vigor en 2020 y 2021 respectivamente. También parece ser que algunos destinos de la Riviera Maya, en México, como las reservas ecológicas Xcaret y Xel-Há piden a los visitantes que cambien las cremas solares problemáticas por muestras biodegradables.

Además del creciente número de investigaciones que relacionan la contaminación de las cremas solares con la salud de los arrecifes, la FDA planteó dudas sobre la seguridad de la mayoría de productos de protección solar. De los 16 ingredientes de protección solar activos en el Mercado, la FDA consideró que solo dos componentes bloqueadores de los rayos ultravioleta, el óxido de zinc y el dióxido de titanio, están “reconocidos generalmente como seguros y efectivos”. Se descubrió que dos ingredientes no son seguros y que hace falta más investigación para determinar si la oxibenzona, el octocrileno, el octinoxato y otros nueve ingredientes pueden considerarse seguros y efectivos.

La ONG Environmental Working Group de Washington, que ha determinado que muchos protectores solares de Estados Unidos no ofrecen “protección significativa para la piel”, defiende que la crema solar debería ser la última opción después de otras medidas de protección como cubrirse con ropa, quedarse a la sombra, comprobar el índice de rayos UV y planear las actividades en el exterior dependiendo del sol.

Al prohibir tres ingredientes habituales, la ley de las Islas Vírgenes de los EE.UU. se alinea con la posición de la FDA, ya que solo permitirá productos de protección solar minerales que utilicen óxido de zinc y dióxido de titanio como ingredientes activos.

A pesar del hecho de que la mayoría de gente vive alejada de los arrecifes de coral, Vardi dijo que cree que hay mucho interés popular por preservarlos. “No creo que nadie quiera vivir en un mundo donde desaparezca todo un ecosistema que cubre menos del 1 % del océano y alberga un tercio de los peces del mar y una cuarta parte de toda la vida marina conocida”.

 

Imagen de cabecera: un pequeño coral aparece en un arrecife en las Islas Vírgenes de Estados Unidos. En las Islas Vírgenes y el resto del Caribe, las amenazas a los ecosistemas coralinos son el cambio climático, las tormentas, la contaminación, el turismo y la pesca. Imagen cortesía de NOAA’s National Ocean Service a través de Wikimedia Commons.

Heather Gies es una periodista cuyos artículos sobre derechos humanos y asuntos ambientales han aparecido en Al Jazeera, the Guardian, the Intercept, National Geographic y otros medios. Puedes seguirla en Twitter en @HeatherGies.

Se prohíben cremas solares que dañan a los corales de las Islas Vírgenes de los EE. UU. (mongabay.com)

27/01/2021