Venezuela, el país donde te puedes encontrar millones de billetes tirados en la calle
La hiperinflación continúa y los bolívares valen menos que el papel en el que se imprimen.
Libre Mercado
19/8/2019
La crisis humanitaria continúa en Venezuela. El régimen bolivariano protagoniza una de las hiperinflaciones más largas e intensas de la historia, con consecuencias trágicas para el conjunto de la población. Basta observar la utilidad que tiene el dinero oficial en el país, el bolívar, para percatarse de la dramática situación que vive el pueblo venezolano. Las calles de las ciudades están llenas de billetes cuyo valor es muy inferior al papel en el que está impreso, convirtiéndose así en basura, literalmente.
Miles de billetes se ven en el suelo por las calles de Venezuela
Los bancos también tiran los billetes
Todo ello se traduce en un enorme empobrecimiento. El salario mínimo no alcanza los 3 dólares al mes y ni siquiera llega para comprar un cartón de huevos. De hecho, en Venezuela se necesitan más de 65 salarios mínimos para poder adquirir una cesta básica de alimentos, según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros.
El consumo medio de carne y pescado se ha desplomado más de un 70% entre 2013 y 2018, y el 93% de los hogares encuestados por Cáritas admitía sufrir carencia alimentaria en el primer trimestre. El dinero venezolano no vale nada.
29/03/2024
1 Comment
Rubén Torres
7 meses agoPor una parte me encanta saber que ocurren cosas como esta porque hace muchos años que avisé de que si no se implementan las nuevas leyes podría ocurrir entre otras cosas una hiperinflación, como efectivamente ha ocurrido. Pero por otra parte, me indigna porque la gente cuando se ve en precarias condiciones respeta menos a los animales vulnerables y al medioambiente. Por desgracia siempre es el que peor parado sale de las crisis. Todo esto ocurre por permitir tener una población de ignorantes que creen en la democracia. No sé cuántos siglos de miseria deben transcurrir para quela gente despierte de su borreguismo.