Protección Civil ha informado de que continúan bombeando el agua que ha inundado el predio y ha provocado el derrumbe para localizar a los otros mineros
México –
ACTUALIZADO: 06 junio 2021 – 22:59 CEST
Familiares de los mineros atrapados esperan información, en Coahuila. Miguel Sierra (EFE)
Los cuerpos de cuatro de los siete trabajadores atrapados por el colapso de una mina de carbón en Coahuila, en el norte de México, han sido localizados, según ha informado Protección Civil. El derrumbe se produjo este viernes alrededor de las 12.50 en el municipio de Múzquiz, en un predio llamado Rancherías, propiedad del productor de carbón Gerardo Nájera. Las autoridades han informado de que continúan bombeando el agua que ha inundado el predio y ha provocado el derrumbe para localizar a los otros mineros.
“Equipos que laboran (trabajan) en la búsqueda y rescate de los trabajadores atrapados en la mina en Múzquiz, Coahuila, han localizado desafortunadamente el cuerpo de una persona sin vida, el cual ya ha sido recuperado”, expresó Protección Civil en Twitter este sábado. Horas después, informaron del hallazgo del segundo cadáver y este domingo comunicaron que habían encontrado los cuerpos de otros dos mineros.
La mina que se derrumbó este viernes es una mina de arrastre, subterránea, por donde unos carros cargan y descargan carbón desde su interior. Algunos empleados y organizaciones sociales habían denunciado las condiciones precarias de esta mina en octubre del año pasado y habían enviado una carta al director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Barlett, sin que recibieran una respuesta. Entre los denunciantes, está uno de los mineros ahora atrapado. La mina había sido inspeccionada por la Secretaría del Trabajo y amonestada en octubre con medidas que no han especificado las autoridades, pero que no presentaban un riesgo inminente. La institución les levantó la restricción en marzo de este año y se encontraban en regla para su operación, según la información oficial.
La defensora de derechos humanos y miembro de la organización Familia Pasta de Conchos, Cristina Auerbach, criticó en declaraciones a este periódico que “no es un accidente” ya que los mineros “no tenían las condiciones para trabajar, ni equipo de seguridad ni medios”. “Es desquiciante que les hayamos entregado todo para evitar una desgracia como esta y no nos hayan hecho caso, les enviamos una carta y fotografías de las condiciones de la mina. Esta es la peor minería”, denunció, y completó: “Hacen creer a la sociedad que heroicamente generamos electricidad para el país, pero la realidad es que es a través de formas precarias y condiciones miserables de vida de los mineros: siempre pobres y siempre los que mueren”.
Empresarios de la zona han criticado, además, que no hay expertos en minas encargados de localizar los cuerpos, pues hace dos años se desmanteló el equipo de profesionales capacitados para este tipo de emergencias, que dependían de un fondo de la Comisión Federal de Electricidad. Actualmente, la operación de rescate está coordinada por el Ejército y las autoridades estatales. En total, la Secretaría de la Defensa y la Guardia Nacional ha desplegado a 143 agentes que trabajan en las tareas de rescate y seguridad para localizar a los otros seis mineros que aún están atrapados.
1 Comment
Rubén Torres
2 años agoEn raras ocasiones las noticias de los medios de comunicación son buenas.
Son cinco las razones por lo que digo esto:
1. Nadie debería seguir extrayendo carbón, dado que desde hace varias décadas ya tenemos la tecnología para producir tanta energía como queramos.
2. Si se hubiese hecho caso a las propuestas que se dicen en los artículos sobre la demografía, no hay necesidad de seguir extrayendo minerales de las minas.
3. Si se hubiese hecho caso a las propuestas que se dicen en los artículos sobre la cárcel, se podría haber evitado la muerte de mineros inocentes.
4. Las condiciones de la mina no eran aptas para trabajar con seguridad, de hecho ya había sido denunciada y sin embargo, los mineros en vez de negarse a seguir trabajando siguieron. Entonces…se podría afirmar que esos gilipollas se lo merecían.
5. Hablan de pobreza, cuando llevo varias décadas explicando cómo salir de ella, pero como no me hacen caso, pues seguirán así y no escarmientan.