Los fragmentos de los vídeos que la Guardia Civil envió a la Fiscalía, al Defensor del Pueblo, que hoy han visto (también incompletos) los diputados de la comisión de Interior del Congreso de los Diputados y que ha podido visionar la Cadena SER están grabados desde un dron, un helicóptero del Instituto Armado y las cámaras fijas del perímetro fronterizo, aunque Interior no ha entregado la totalidad del minutaje. A pesar de la claridad de las imágenes y de que los jóvenes se hacinan prácticamente bajo la bandera española, fuentes de Interior señalan que se «amontonaron» unos encima de otros en una «zona operacional conjunta donde actúan indistintamente gendarmes marroquíes y españoles» sin negar que esto sea territorio de soberanía española
Nicolás Castellano
Cadena SER, 07/11/2022
Madrid
En los fragmentos de los vídeos oficiales de la Guardia Civil sobre la masacre del 24 de junio en Melilla, que ha podido visionar la Cadena SER, o que han sido descritos parcialmente por distintas fuentes a esta redacción, se observa cómo los jóvenes «quedaron aplastados en suelo español», «a la vista de los funcionarios españoles», que «no se alertó a ningún servicio de urgencias de Melilla para asistir a los que estaban atrapados» en el perímetro fronterizo español (esto consta oficialmente por la entidad con competencias sanitarias en la ciudad autónoma, según ha confirmado la SER), y que los 460 chicos que quedaron junto a la carretera melillense fueron devueltos ilegalmente a Marruecos, con intervención de los gendarmes alahuitas dentro del territorio español. De estos vídeos llama la atención además que varios de los chicos fueron expulsados después de permanecer tumbados en el suelo durante muchos minutos, sin ninguna asistencia sanitaria, en la carretera española que rodea el perímetro fronterizo.
Algunos de estos expertos jurídicos que han visionado las imágenes señalan de manera clara que «con independencia de las discusiones jurídicas acerca de que sea territorio nacional, los agentes, en todo momento, pudieron haber evitado la tragedia, era una cuestión de derechos humanos y se debe investigar si hubo un posible delito de omisión de socorro» por parte de los funcionarios españoles, señalan estos expertos. Algo que niegan categóricamente desde Interior, aunque no responden a la pregunta de por qué no se dio aviso a los servicios de urgencia mientras seguían aplastados decenas de cuerpos a solo unos metros bajo la bandera española del puesto fronterizo.
La Masacre de Nador-Melilla ha vuelto a desempolvar el argumentario oficial que trata de justificar lo que no tiene encaje en nuestro ordenamiento jurídico ni tampoco en la legalidad internacional. Cada vez que se violan los derechos humanos en la frontera sur española «o se reinventa el concepto de frontera o se habla de situación sin precedentes que parece querer justiciar actuaciones totalmente ilegales». Solo unos ejemplos: también en Melilla, los 103 expulsados con un fuerte sedante, el haloperidol, en 1996, cuando dijo Aznar » teníamos un problema y teníamos que solucionarlo», la decena de muertos también en Melilla en octubre de 2005, con expulsiones al desierto argelino por parte de Marruecos después de que los migrantes fueran entregados por el gobierno de Zapatero, las 15 muertes de la tragedia del Tarajal de febrero de 2014 con decenas de expulsados ilegalmente con las cámaras de la Guardia Civil de nuevo como testigo, o la expulsión de miles de personas, incluidos centenares de niños mojados desde las playas de Ceuta a Marruecos en mayo del 2021…
Fotografías cedidas a EFE por una vecina del Barrio Chino, en la provincia de Nador y fronterizo con Melilla. Las fotografías fueron tomadas durante el asalto de cientos de emigrantes subsaharianos a las vallas que rodean a esa ciudad española. / Stringer
Esta vez los responsables de Interior han vuelto a tirar de ese viejo manual. A pesar de las distintas versiones aportadas desde el 24 de junio, en la línea de crear un nuevo concepto de fronteras en Ceuta y Melilla, estas imágenes de la Guardia Civil «no dejan lugar a duda de que las muertes de la masacre de Melilla se produjeron en suelo español», afirman tres de los expertos que las han visionado.
Desde que en el año 2004 se comenzaron a levantar las vallas, tal y como las hemos visto crecer hasta ahora, nadie ha puesto en duda que las autoridades españolas construyen el perímetro fronterizo en su territorio nacional. Fue el Ejército, según la delegación del Gobierno en Melilla, en concreto los legionarios, los que colocaron » por iniciativa unilateral», las primeras concertinas en 2004 y 2005, y ese mismo año, coincidiendo con varios intentos de entradas de migrantes que acabaron con una decena de muertos, el Defensor del Pueblo publicó en su informe «que el perímetro está construido -como por otra parte es lógico- en territorio español, que su titularidad plena pertenece a España y que su custodia solo se realiza por fuerzas españolas», afirmaba hace ya 17 años la institución. «No le corresponde a la administración española determinar dónde ha de comenzar a regir la legislación de nuestro país, dicha aplicación territorial viene regida por los tratados internacionales o en su caso la costumbre internacional que fija los límites con los estados vecinos», algo que en el caso de España y Marruecos está acordado desde el siglo XIX.
Partiendo incluso desde la nueva tesis de Interior, que habla de una «zona operacional conjunta» entre agentes y españoles para hablar del lugar de la tragedia, la legislación y el propio informe del defensor del Pueblo de 2005 y que ha sido reiterado en informes posteriores, señala que «la actuación de los funcionarios de los cuerpos y fuerzas de seguridad de nuestro país dentro y fuera de nuestro territorio y singularmente las zonas neutrales que separan Ceuta y Melilla del territorito marroquí están también reguladas por la ley española», es decir, que en los sucesos del pasado 24 de junio, según estos informes, «no queda duda de la responsabilidad de España porque no queda duda que desde 2005 todo era territorio español desde el primer elemento fronterizo», afirma uno de estos expertos.
En las imágenes de la Guardia Civil del 24J se observa claramente que desde las 7 de la mañana se veía venir al grupo desde los montes de Nador hacia la frontera española, que durante muchos minutos se observó «el peligro cierto que se estaba produciendo al hacinarse centenares de personas contra las puertas de las vallas», que tal y como ha comprobado la SER, un grupo trataba de abrirlas a golpes con mazas de hierro y cortar las puertas con una radial (un elemento nunca visto hasta ahora en un intento de salto a las vallas) y que «aun así no se articuló ninguna alternativa razonable desde el punto de vista de la seguridad para evitar la tragedia», señalan dos de los expertos.
«Resulta tan evidente que es suelo español que en el mismo sitio donde caen los migrantes aplastados unos encima de otros, solo unos minutos antes de la tragedia, hay dos guardias civiles que resultaron heridos junto a esas puertas y por eso la dotación del instituto armado se retiró a las puertas situadas unos metros más atrás, desde donde se puede observar en línea recta lo que sucedió a esos jóvenes y por tanto podrían haber pedido auxilio a los servicios de emergencia de Melilla o Marruecos», denuncia uno de estos expertos.
Preguntados a algunos de los diputados que han visto parcialmente esas imágenes en su visita de hoy a Melilla, casi 6 meses después de las muertes, responden que «hemos visto pocas imágenes, editadas y recortadas, nunca el minutaje completo».
Inmigrantes subsaharianos amontonados tras los enfrentamientos con la Policía de Marruecos durante un intento de salto de la valla de Melilla. / AMDH-NADOR
Los momentos claves de la tragedia tomados por el dron y el helicóptero del Instituto Armado
- 8:12 horas de la mañana: El grupo aparece en la curva de la valla en su bajada desde los montes de Nador.
- 8:14: Un grupo de jóvenes trata de saltar por esa zona y no lo logran,
- 8:18: Comienzan a lograr saltar a la zona llamada «el patio», comprendida entre la puerta que tiene Marruecos para acceder a esta zona del Barrio Chino de Melilla y las dos puertas donde están ya los tornos fronterizos con agentes de seguridad españoles.
- 8:20: El grupo que trata de derribar esas puertas es cada vez mayor y tanto las fuerzas españolas como las marroquíes usan botes de humo y pelotas de goma para tratar de disuadirles.
- 8:23: Se sigue observando en las imágenes a agentes de la guardia civil en las puertas donde finalmente cayeron aplastados los migrantes. Algunos de los agentes llevan mascarillas de gas y se ve cómo devuelven las piedras que les lanzan los migrantes, que también hacen uso de palos.
- 8:30: Se observa claramente que dos de los migrantes usan mazas de hierro para tratar de abrir las puertas de acceso a los puntos de control españoles.
- 8:31: Se observan las chispas que saltan del uso de una radial en una de las puertas. Uno de los migrantes se observa tratando de cortar la cerradura. A esa misma hora es más visible el uso de gas pimienta por parte de la Guardia Civil (algo que harán en buena parte de la intervención).
- 8:34 algunos migrantes saltan al techo del puesto fronterizo español.
- Las imágenes de más calidad de las aportadas por la Guardia Civil son las del dron, sin embargo, en los minutos claves que van a continuación no se aportaron las tomas del dron (desde las 8:34 minutos a las 8:50 cuando sucede el aplastamiento). Esas imágenes del dron no constan o no han sido entregadas.
8:35 (imágenes del helicóptero): De nuevo se ven las mazas y la radial.
8:37: Se intensifica el lanzamiento de botes de humo contra un grupo que está cada vez más hacinado contra las puertas situadas bajo la bandera española.
8:41: Varias decenas acceden por encima de las concertinas (un elemento que España anunció hace años que había retirado).
Entre las 8:42 y las 8:43: Los jóvenes sudaneses logran romper la primera puerta, varios caen y otros van haciéndolo encima, Se «amontonan» decenas y decenas, algunos piden ayuda, otros que consiguen pasar por encima de ellos tratan de ayudarles y tirar de sus brazos, pero al estar aplastados uno encima de otros resulta imposible mover a muchos de los que están tirados contra el suelo.
- 8:43: Desde este momento muchos siguen pasando por encima de los que se mantienen en el suelo y corriendo por los pasillos del puesto fronterizo español, al comprobar que las siguientes puertas están cerradas saltan al techo y empiezan a dejarse caer hasta la carretera de Melilla situada junto a la valla.
8:44: Se abre la segunda puerta, pero no del todo, y otro grupo queda atrapado entre el suelo y esa puerta doblada. Por esta zona pocos logran acceder.
8:45: Los migrantes que logran cruzar las puertas y subir al techo siguen saltando hacia la carretera española, pero la Guardia Civil los «embolsa entre la valla y el quitamiedos de la carretera».
8:47: Es el momento en el que los guardias y los equipos antidisturbios del Instituto Armado (los GRS) se emplean con más contundencia. Se observa a agentes golpeando con porras a algunos de los jóvenes que tienen contra el suelo, se observa a uno de los guardias pateando a ese chico que ya está siendo golpeado por otros dos de sus compañeros.
8:49: Se aleja el helicóptero y no se ven las imágenes por unos minutos.
- 8:50: Desde esta hora se observa repetidamente que los guardias civiles continúan con la maniobra de «embolsamiento», usando gas pimienta, pelotas de goma, a veces arrastrando hacia la carretera española a los que quedan «aparentemente desmayados».
- 8:59: Empiezan a llevar en volandas a algunos de los migrantes hasta la puerta del paso fronterizo para «devolverlos» a Marruecos.
- 9:04: Dos guardias civiles están con un joven que patalea en el suelo, detrás de la línea que han creado los guardias en la carretera.
- 9:19: Agentes marroquíes están en el puesto fronterizo español, dentro y en el techo, golpeando con porras y deteniendo a algunos de los jóvenes.
- No hay imágenes en este espacio de tiempo hasta las 9:31
- 9:31: Desde este momento continúa la operación de «estabilización» de la Guardia Civil y comienzan las «devoluciones en frontera». Las imágenes que han sido entregadas por la Guardia Civil terminan a las 9:35 de la mañana.
- Desde las 8:45 de la mañana no se vuelven a ver imágenes de lo que seguía pasando en la zona donde quedaron aplastados unos encima de otros varias decenas de esos jóvenes en las puertas del puesto fronterizo español.
El dato final de esos jóvenes fue de 470 expulsados «sin las garantías jurídicas individuales que establece el Tribunal Constitucional», tal y como denunció el Defensor del Pueblo en su primer informe preliminar publicado hace varias semanas.
Desde Interior siguen defendiendo que «no hay responsabilidad en la actuación de la Guardia Civil, que su labor » fue proporcionada y en base a la legalidad española» y que se trató de uno de los saltos «más violentos y masivos» registrados hasta ahora.
En lo que no hay ninguna duda es que pocas veces se ha visto en el planeta un número tal de muertos en una frontera, ante la mirada, intervención u omisión de fuerzas de seguridad del estado de dos países, en este caso España y Marruecos.
De las causas detalladas de la muerte de los migrantes, del lugar exacto donde murieron asfixiados o de la cifra exacta no se han conocido más datos porque ni España ni Marruecos han informado sobre ello.
8/11/2022
1 Comment
Rubén Torres
2 años agoPor enésima vez se puede comprobar como los gobernantes nos demuestran que son un fraude, unos incompetentes. Llevo varias décadas advirtiendo lo peligroso que es equivocarse al votar en las elecciones.
Cuando a la gente se le da la oportunidad de ganar un buen sueldo o una forma de ganar mucha pasta y con unas leyes justas, dudo que se le pase por la cabeza irse de su país salvo de turismo.
Así pues, bastaría con sustituir a los políticos incompetentes para acabar con las miserias y demás problemas socioeconómicos.