8/07/2024

Un bien común para todo el vecindario de Pilas se perdió. La posibilidad de compra del emblemático espacio naturalizado del Barrero de Robaina: un Paisaje cabecera de Pilas y escenario natural a la par que cultural.

El paisaje es de todos y a la vez de nadie, y es por ello que cuando un espacio presenta valores patrimoniales, históricos, culturales y naturales, reconocidos, es obligación de los administradores de lo público su salvaguarda y su intervención en caso de amenaza, anteponiendo el bien común a la propiedad privada, debiendo quedar ésta subordinada al interés general de la preservación del entorno y su paisaje, nuestros paisajes.

Y el Barrero de Robaina entraba de lleno en estos espacios a proteger pero se ha dejado caer definitivamente en manos particulares.

El valor etnológico del Barrero de Robaina, sus valores naturales y la propia implicación personal para muchos de los vecinos y vecinas de Pilas, hacían de este espacio un elemento central para conocer Pilas su historia reciente y su potencial natural.

Su origen está en el uso de la finca como zona de extracción de barros para los Mantillos en los que se fabricaban ladrillos al estilo tradicional, el abandono de la actividad allá por los años 60 del pasado siglo, dejó una serie de vasos lagunares que se llenaban con las lluvias y se mantenían hasta bien entrada la primavera debido al carácter impermeable de los suelos.

El valor natural de este espacio es sobradamente conocido por el ayuntamiento, reivindicada reiteradamente durante décadas su protección y puesta en valor por el colectivo ecologista Alcarayón. Incluso el propio ayuntamiento, en colaboración con el Dpto. de Biología de la UPO, publicó en 2011 la Flora del término Municipal, donde destaca precisamente este enclave único.

Además, sumamos a este conocimiento y saberes, los estudios de Flora publicados en los volúmenes de Historia de Pilas por la Diputación de Sevilla, donde se manifiesta la especial particularidad que al paso de los años adquirió este barrero con diversas tipologías de naturalización: La orografía diversa generaba charcas y lagunas temporales mediterráneas, hábitats idóneos para distintas especies de anfibios, como gallipatos, tritones y ranas meridionales, así como por aves. Presentaba más de 300 especies de flora vascular autóctona en apenas 1 hectárea, parte de la misma, flora endémica y exclusiva del suroeste Ibérico y especies ibero-magrebís. Literalmente, el barrero de Robaina era un santuario para la flora del entorno de Doñana.

Pero parece que estos valores se desconocían, ha sido roturada la superficie, colmatadas las lagunas y eliminada la vegetación natural. Así pues, este encanto de Paisaje se perdió, muy posiblemente frente a una parcela más dentro del omnipresente olivar intensivo.

Decíamos más arriba, que el paisaje es de todos y a la vez de nadie y este “nadie” significa –de Ninguna persona de importancia o autoridad- el paisaje es un bien común, es un plural. Despreciando esta PREMISA, nos despreciamos a nosotros mismos, ante tanta uniformidad y falta de visión y compromiso con nuestras generaciones futuras.

https://www.ecologistasenaccion.org/320642/el-barrero-de-robaina-una-oportunidad-perdida-por-el-ayuntamiento-de-pilas/

3/08/2024