Por Amina Jover | 14 enero 2024
Una nueva investigación destaca el papel de los microorganismos en la protección de los corales contra el estrés térmico
Los investigadores han descubierto por primera vez un microbio unicelular que puede ayudar a los corales a sobrevivir a fenómenos de calentamiento oceánico como el blanqueamiento. El nuevo estudio, dirigido por científicos de la Escuela Rosenstiel de Ciencias Marinas, Atmosféricas y de la Tierra de la Universidad de Miami y del Instituto de Biología Evolutiva (IBE: CSIC-UPF) de Barcelona, ofrece nueva información sobre el papel que podrían desempeñar los microbios para ayudar a los corales a resistir las proyecciones de calentamiento de finales de siglo.
Los científicos han descubierto que la abundancia de ciertos protistas en el microbioma de los corales -los diversos microorganismos que viven en su interior- puede informar a los científicos sobre si un coral sobrevivirá al estrés térmico. Estos hallazgos tienen implicaciones importantes para los corales de todo el mundo, ya que se enfrentan a eventos de calentamiento del océano más frecuentes, especialmente aquellos sin zooxantelas, el alga simbiótica que es expulsada de un coral durante el blanqueamiento inducido por el agua caliente.
«Es la primera vez que se demuestra que un microbio que no es un alga influye en la capacidad de los corales para sobrevivir a un episodio de estrés térmico», afirma Javier del Campo, autor principal del estudio, profesor adjunto de la Rosenstiel School e investigador principal del IBE, un centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad Pompeu Fabra (UPF). «A medida que los corales se enfrentan a más y más eventos de estrés térmico debido al cambio climático, una mejor comprensión de todos los microbios que pueden influir en la capacidad de supervivencia puede informar a los profesionales de la conservación en cuanto a qué corales deben priorizar para la intervención.»
Para llevar a cabo el estudio, el equipo internacional de investigadores recogió muestras de corales de todo el Mediterráneo para analizar su microbioma y realizar experimentos de estrés térmico. Amplificaron y secuenciaron dos tipos de ARNr para estudiar las bacterias y los protistas presentes en el microbioma de una especie de coral blando, el fusta violescente (Paramuricea clavata), antes de someterlos a un estrés térmico natural en el laboratorio para examinar los signos de mortalidad.
Paramuricea clavata es un importante arquitecto de los arrecifes templados mediterráneos que actualmente está amenazado por episodios de mortalidad masiva relacionados con el calentamiento global.
Los investigadores descubrieron que un grupo de protistas unicelulares parásitos, llamados Syndiniales, es más común en los corales que sobreviven al estrés térmico, mientras que los Corallicolids, un grupo de protistas estrechamente relacionado con el parásito que causa la malaria en los seres humanos, es más común en los corales que mueren por estrés térmico.
Según los investigadores, los protistas, o eucariotas unicelulares, están menos estudiados que las bacterias en la mayoría de los organismos huéspedes, pero pueden tener una gran influencia en la salud de su huésped coralino.
«El microbioma es un componente vital de la salud del coral huésped y deberíamos estudiar todos sus miembros, desde las bacterias hasta los protistas», afirma del Campo.
18/02/2024
1 Comment
Rubén Torres
3 años agoQue dentro de la misma está ubicada la rádula
R. Los cefalópodos carecen de rádula, eso es para los gasterópodos terrestres. Estos animales poseen un pico, semejante a las aves de la familia psitácidas.
Es importante señalar que el calamar volador tiene tres corazones.
R. Vaya novedad, como todas las demás especies de calamar