El biocombustible que se obtendría de los residuos orgánicos que llegan al Relleno Sanitario podría bajar los niveles de dióxido de carbono en la ciudad.
2018/08/15
A partir de los residuos orgánicos se podría llegar a obtener biogás para Transmilenio. Foto: archivo/Semana.com
*Con información de la Agencia de Noticias de la Universidad Nacional.
A partir de pruebas y simulaciones, tras usar biogás en motores ciclo Otto, Ower Rolando Barreto, magíster en Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional de Colombia, logró demostrar la viabilidad de emplear este combustible en Bogotá
«Este biocombustible, que se obtendría de los residuos orgánicos que llegan al Relleno Sanitario Doña Juana, se podría utilizar en el sistema Transmilenio de transporte público de la ciudad», señala el experto, quien agregó que a partir de esta iniciativa se podría reemplazar hasta un 20 por ciento de la gasolina.
Según Barreto el potencial de extracción y posconsumo del biogás en Doña Juana es del 98%, siempre y cuando se haga su tratamiento de extracción de CO2 para la distribución de metano.
«El uso de este combustible bajaría los niveles de emisión de CO2 (dióxido de carbono) que produce el uso de gas natural de Cusiana, uno de los yacimientos petrolíferos más grandes de Colombia, que cuenta con reservas superiores a los 3.000 millones de barriles», apuntó el investigador luego (después) de realizar una modelación de producción de biogás por medio del software Land Gem.
Sin embargo, el experto considera que se debe trabajar en estudios de factibilidad económica que incluyan la construcción de una planta de tratamiento de biogás que permita inyectarles a las redes de distribución gas natural como metano con una calidad superior al 98 por ciento.
«Mezclar biogás tratado con el gas Cusiana distribuido en Bogotá, mejoraría el metano y reduciría las cantidades de etano, propano y butano, que son los generadores de exceso de temperatura, reacción que ocasionaría inconvenientes mecánicos si no se controla la relación aire-combustible, ángulo de avance y tiempo de quemado», afirmó.
El investigador afirma que si se inicia el tratamiento de basuras para generar combustible, se podría tener una reserva de biogás hasta 2030, con una producción de entre 6.000 y 7.000 m3 por hora.
Luego de revisar la caracterización de los volúmenes de residuos depositados en Doña Juana, se corrió el modelo Land Gem, que calculó la producción esperada de biogás en el relleno.
«Después de caracterizar un motor de combustión en el laboratorio y en el banco dinamométrico y sacar las curvas de potencia, se instaló un kit de gas natural y se le hizo la adaptación con una ecolectrónica, para que fuera electrónico y manipulable. Con el resultado de las curvas se comparó con el modelo Chemkin, que evalúa la combustión», explica la Agencia de Noticias de la Universidad Nacional en un comunicado.
«Encontramos que la operación de combustión con un biogás 100% metano es muy factible. Si usáramos ese gas por lo menos en un proyecto como Transmilenio se podrían tener vehículos más limpios, Euro 6, que es el estándar europeo más alto”, concluye Barreto.
9/01/2021
2 Comments
Rubén Torres
3 años agoPésima idea por varios motivos:
1. El metano es un gas muy propenso a explotar, por lo que pone en riesgo las personas que estén cerca de él.
2. Existen motores que descontaminan (camiones y autobuses), por lo que no hay necesidad de cambiar de combustible.
3. El problema de la basura se soluciona con gestionarla de forma adecuada, por lo que se puede convertir en energía y en mantillo para devolver su fertilidad a los bosques incendiados y prevenir la erosión.
4. Existen máquinas que convierte el plástico en distintos carburantes, dando la oportunidad a la gente de producirlo y venderlo, por lo que se consigue dos cosas: mantener limpias las calles de plástico y reducir la gente desempleada.
5. En España se ha inventado cómo transformar los vehículos de combustión en eléctricos. Por lo que el tema de la polución por CO2 está solventado si se invirtiera en ellos.
Jorge Zarate
3 años agoPor fin una idea para el aprovechamiento de los rellenos, y su participación en la solución del problema de la contaminación del aire en Bogotá, y quitarse el san benito de que euro 4 o euro 5 para el transporte en los buses de transmilenio.