Cuando un país es sometido por un dictador tirano o un pésimo presidente, toca usar el ingenio, pues está claro que cualquier gobierno está arropado por la policía y por el ejército. Por lo tanto, no hay posibilidad de lograr nada a base de protestas, huelgas o de efectuar manifestaciones. Todo eso es papel mojado. Pero, no todo está perdido. Si se consigue la cooperación de un grupo bien nutrido de gente, el panorama puede dar un giro de 180ª a nuestro favor.

Es muy importante lograr una buena coordinación entre la gente que quiera realmente derrocar al patán de turno.

En el caso del Gobierno español dirigido por el traidor de Pedro Sánchez y demás partidos que lo apoyan, es de dominio público que está a su disposición el Falcón, coches blindados y el palacio de la Moncloa. Precisamente por esos bienes hay que empezar, es vital arrebatarle esas posesiones.

Habría que conseguir la intervención de varias máquinas pesadas como: excavadoras, martillos hidráulicos y retroexcavadoras.

Se trata de rodear la Moncloa con esas máquinas. Una vez hecho esto, las demás máquinas se dedicarán a cerrar el acceso de todas las carreteras para que la pasma no pueda acceder al palacio. La gente deberá apoyar a los maquinistas mientras las máquinas con martillo destrozan la Moncloa y todos los vehículos oficiales.

Otro grupo aparte se dedicará a destrozar el Falcon usando drones cargados de termita.

Se sabe que toda rata que se ve amenazada en su guarida sale corriendo a ponerse a salvo. Pero fuera le está esperando cientos de personas que le van a ”mostrar su agradecimiento”.

Todo esto puede parecer un disparate, por supuesto que lo parece, pero se podría conseguir si la gente estuviese dispuesta a luchar ante este pésimo presidente.

4/02/2025