Se trata, según la autoridad ambiental, de animales que están incluidos en los Libros Rojos de Especies Amenazadas en el país, además de contar con una protección especial en toda la Reserva de Biosfera Seaflower, en la Isla. También se incautaron 2.000 kilos de otros peces.
2020/10/23
En total las autoridades decomisaron más de 8 toneladas de peces de diferentes especies. Foto: Coralina
En un trabajo articulado entre diversas entidades locales y nacionales, se logró la incautación de 6.725 kilogramos de peces loro, que se encuentran incluidos en los Libros Rojos de Especies Amenazadas en el país, y que cuentan con la protección especial en toda la Reseva de la Biosfera Seaflower, en San Andrés.
De acuerdo con la información dada a conocer por la Corporación para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina (Coralina), el decomiso, que involucra varias especies de pez loro, viola todas las normas dado que estos ejemplares están protegidos en la zona, de acuerdo con la resolución 369 del 15 de julio de 2019, expedida por la propia autoridad ambiental.
El operativo realizado por la Armada Nacional a través de la estación de guardacostas, la Policía Nacional, Fiscalía General de la Nación, Migración Colombia, Gobernación del Departamento a través de la Secretaría de Agricultura y Pesca y Coralina, también permitió el decomiso de otras especies de peces, con un aproximado de 2.000 kilogramos.
Diversas especies fueron incautadas. Foto: Coralina
De esta forma, la pesca realizada de forma ilegal sumó más de 8 toneladas, incluido el decomiso de pesca blanca y langosta, la cual fue hallada a bordo de dos embarcaciones de bandera jamaiquina en la isla de Serrana.
De acuerdo con lo expresado por el subdirector de Mares y Costas de Coralina, Gilberto Myles, «con el apoyo de la Armada Nacional se continuarán haciendo los controles sobre las Áreas Marinas Protegidas, para frenar la depredación que se viene haciendo sobre recursos pesqueros y especies que están en veda, en extinción y protegidas».
La pesca incautada de pez loro fue puesta a disposición de la Corporación Coralina y las otras especies en custodia de la Secretaría de Agricultura y Pesca.
Capitanes capturados
Por otra parte, los dos capitanes de las embarcaciones fueron capturados y dejados a órdenes de la Fiscalía General de la Nación y la tripulación en manos de Migración Colombia.
El cargamento de pescado fue hallado a bordo de dos embarcaciones de bandera jaimaquina. Foto: Coralina
De acuerdo con la autoridad ambiental, es importante que los actores del mar y la comunidad en general tengan en cuenta que la Resolución 369 de 2019 establece restricciones para la captura y comercialización de los peces loro y otros peces herbívoras y omnívoras, tendientes a la conservación del ecosistema coralino, así como de las playas del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina.
El objeto de dicha resolución es promover la conservación de los arrecifes coralinos y las playas mediante la adopción de medidas que desestimulan la captura, caza o pesca de los recursos hidrobiológicos denominados peces loro y cirujanos, medida que busca mitigar o desactivar presiones de explotación inadecuada sobre peces herbívoros particularmente sobre peces loro.
Además, contempla una serie de sanciones establecidas en la ley 1333 de 2009 y demás normas complementarias, para quienes realicen estas actividades de caza.
29/11/2020
5 Comments
Rubén Torres
5 meses agoSi realmente lo que se pretende son medidas que desestimulan la captura, caza o pesca de los recursos hidrobiológicos. Deberían actuar como se hace en Europa y en Marruecos con los traficantes de droga; se les incautan los vehículos donde la transportan (lo sé por experiencia propia). Está claro que las sanciones no dan el resultado esperado de disuasión. Vuelven una y otra vez a salir a pescar especies prohibidas. Sin embarcación les sería más complicado continuar pescando ¿no les parece? Con esas embarcaciones se podrían subastar, destinando las ganancias en poner más vigilancia a los pescadores.
Meri
5 meses agoNo estoy de acuerdo con lo que propones de incautar las embarcaciones, eso les obligaría a endeudarse para pillar otra dado que los pescadores no saben hacer otra cosa más que pescar.
Así pues, lo que se debería hacer es atacar el problema en el origen; los políticos que no saben legislar de forma que imponen leyes absurdas que no permite que la gente se busque la vida de otras formas.
¿No os parece que contra más se insiste en prohibir ciertas cosas fomenta delinquir?
Toni Ferrer
5 meses agoNo es cuestión de la prohibición en si misma, si no de sentido común, no es lo mismo prohibir la pedofilia que prohibir comer carne, hay cosas que prohibirlas es estúpido y es suficiente que te lo prohíban para querer hacerlo.
Jose Manuel Perez
5 meses agoLa cuestión es «ciertas cosas»
No es lo mismo el trafico de personas que abortar sin ir mas lejos.
ALFREDO PASCUAL
4 meses agoArgumentos a favor de la idea de que la prohibición aumenta el crimen:
Mercado negro: Las prohibiciones pueden crear mercados negros donde las actividades ilegales se controlan por organizaciones criminales, lo que genera violencia y corrupción.
Aumento de los precios: La prohibición puede aumentar el precio de los bienes o servicios ilegales, haciéndolos más atractivos para los delincuentes.
Estigmatización: Las prohibiciones pueden estigmatizar a los usuarios de ciertos bienes o servicios, empujándolos a la clandestinidad y aumentando el riesgo de actividades delictivas.
Desafío y rebeldía: Algunas personas pueden verse atraídas a participar en actividades prohibidas por el simple hecho de estar prohibidas, desafiando la autoridad y buscando emociones fuertes.
Argumentos en contra de la idea de que la prohibición aumenta el crimen:
Prevención de daños: Las prohibiciones pueden prevenir daños a la salud pública, la seguridad o el bienestar social causados por el consumo o uso de ciertos bienes o servicios.
Reducción del consumo: Las prohibiciones pueden reducir el consumo general de ciertos bienes o servicios, incluso si no los eliminan por completo.
Control social: Las prohibiciones pueden reflejar las normas y valores de una sociedad, proporcionando un marco para el control social y la disuasión del comportamiento delictivo.
Alternativas reguladas: En algunos casos, la prohibición puede ser reemplazada por un sistema de regulación y control que permita un acceso seguro y legal a ciertos bienes o servicios.
En definitiva, la relación entre la prohibición y el crimen no es simple y depende de diversos factores, como el tipo de bien o servicio prohibido, el contexto social, cultural y económico, y la efectividad de las medidas de aplicación de la ley.
Es importante realizar investigaciones y análisis cuidadosos para evaluar los posibles efectos de la prohibición en cada caso específico, considerando tanto los beneficios potenciales como los riesgos asociados.
En el caso de la pregunta de Hidalgo Cantos, se necesitaría más información sobre el contexto específico de la prohibición en cuestión para poder dar una respuesta precisa y completa.
Sin embargo, la información proporcionada anteriormente puede servir como base para una reflexión más profunda sobre la compleja relación entre la prohibición y el crimen.