Los cañones electromagnéticos prometen ser protagonistas de la guerra del futuro con sus ataques a velocidades hipersónicas, su enorme precisión y su gran poder destructor

Un prototipo de cañón de cañón de riel hipersónico. (General Atomics)

Por

Omar Kardoudi

12/12/202

Una enorme cantidad de dificultades técnicas hicieron que el Pentágono parara en 2021 su costosísimo proyecto de construir un railgun, un cañón magnético capaz de lanzar proyectiles a velocidades hipersónicas y a cientos de kilómetros de distancia. Ahora, China asegura haberlas superado con una tecnología basada en inteligencia artificial que le permite disparar de manera continua sin problemas.

«Las armas de guerra están pasando paulatinamente de la energía química a la electromagnética […] La cadencia de disparo continua es un indicador crucial de la eficacia en combate de los sistemas de lanzamiento electromagnético de raíles», escribe el equipo de la Universidad Naval de Ingeniería que está detrás de este desarrollo en un reciente artículo del que se ha hecho eco el South China Morning Post. “Este avance significa que «los sistemas electromagnéticos de lanzamiento por raíl pueden disparar ahora de forma fiable, rápida y sin interrupciones», explican.

Cómo funcionan

Los railguns fueron propuestos hace más de un siglo por el francés André Louis Octave Fauchon-Villeplée, que en 1917 planteó los principios teóricos de esta arma. Aunque su desarrollo sólo comenzó a tomar forma a partir de mediados de los años 40, no ha sido hasta principios del siglo XXI cuando se han conseguido los suficientes avances como para demostrar su increíble poder destructivo.

En este tipo de armas, la fuerza electromagnética lanza un proyectil o misil a través del tubo del cañón, alcanzando velocidades hipersónicas y distancias superiores a las de los cañones tradicionales. El sistema cuenta con una fuente de energía y dos rieles que cuando entran en contacto con el proyectil cierran el circuito, generando fuertes campos magnéticos que hacen que éste se acelere a gran velocidad.

Pero los ingenieros que los construían pronto se encontraron con varios problemas que imposibilitaban su puesta en marcha para la guerra. El reto más grande es quizás la longevidad de los cañones. La potencia de estas armas es tal —con una velocidad de salida del proyectil hipersónica, al menos cinco veces la velocidad del sonido— que el interior de los cañones se deteriora con rapidez, afectando la operatividad del cañón en combate real.

Sin embargo, los investigadores chinos aseguran haber conseguido solventar este problema gracias a una inteligencia artificial que les ha permitido crear un sistema totalmente nuevo. Según el equipo, este sistema les permite recoger y analizar simultáneamente datos de más de 100.000 puntos de componentes (10 veces el número de sensores de un avión moderno) y toma decisiones por su cuenta para evitar que el cañón se sobrecaliente.

Las armas electromagnéticas chinas

El equipo sostiene que los proyectiles pueden llegar a salir a 2 km por segundo del cañón, lo que significa que pueden alcanzar cualquier objetivo en un radio entre 100 y 200 km. Muy por encima, aseguran, de las decenas de kilómetros que alcanzan los proyectiles de artillería normales. En una de sus pruebas, el railgun fue capaz de disparar un número similar de proyectiles que algunas baterías de artillería actuales: 120 proyectiles. Los investigadores dicen que tras los disparos, todo el sistema permaneció intacto. «Nunca antes se había hecho público un trabajo similar», afirman.

El equipo asegura que su inteligencia artificial ya ha salvado el arma en tres ocasiones. La IA ha podido encontrar cada problema y solucionarlo haciendo que el cañón electromagnético funcione cada vez con más fluidez. En los últimos 50 disparos, dicen, no se produjo ni un solo fallo.

El South China Morning Post apunta que este tipo de armas electromagnéticas serán claves en el futuro para el ejército chino, sobre todo para decantar a su favor la carrera por el control del mar que por ahora domina EEUU. El pasado agosto ya aseguraron haber probado con éxito lo que llamaron el cañón de bobina más potente del planeta. Según los científicos detrás de su desarrollo, esta nueva arma lanzó proyectiles de 124 kilogramos a una velocidad de 700 km/h.

Otro país que está buscando dominar esta tecnología es Japón, que el pasado octubre afirmó haber realizado con éxito una prueba de disparo de un cañón de riel electromagnético marítimo de calibre medio a través de una plataforma en alta mar.

https://www.elconfidencial.com/tecnologia/novaceno/2023-12-12/china-canon-magnetico-infinito-eeuu-armas-futuro_3791256/

1/03/2024