La autopsia confirma que las 12 uvas asfixiaron a una mujer

Madrid – 05 ene 1996

La autopsia practicada a la mujer de 72 años que falleció en Nochevieja tras atragantarse con las tradicionales uvas de fin de año (véase EL PAÍS del martes día 2) ha confirmado que Josefa Moreno Carrillo murió por dicha obstrucción respiratoria, informaron a la agencia Efe fuentes judiciales. La titular del Juzgado de Instrucción número 41, Almudena Álvarez, quien se encontraba de guardia la madrugada de Año Nuevo, tomará declaración al médico del servicio de urgencias del Insalud que atendió a la fallecida y que manifestó que la muerte se produjo antes de la medianoche, cuando se toman las uvas en Nochevieja.

Fuentes del Insalud dijeron que el pasado día 3 el médico que acudió al domicilio de la mujer, en Doctor Esquerdo, no quiso certificar su muerte porque no estaba seguro que hubiese fallecido verdaderamente a las doce de la noche.

El forense que practicó la autopsia confirmó la existencia de cuerpos extraños en la vías respiratoria de Josefa Moreno, los restos de las uvas. También encontró síntomas de muerte por asfixia en la sangre y en los pulmones.

Josefa se encontraba cenando con su marido el día de Nochevieja cuando sufrió un ataque, repentino al atragantarse con las uvas, por lo que su marido llamó al 061, aunque los servicios de urgencias llegaron cuando Josefa ya había fallecido. El Juzgado de Guardia abrió una investigación, ya que el médico no certificó la hora de la muerte en la que el marido decía que se había producido.

8/01/2024